Concurso: "Cuéntanos tus miedos" / Les temo a las cucarachas cuando vuelan

¿A qué le tienes miedo?

Existen varias cosas a las que les temo:

1- Las cucarachas volando: Bueno, creo que este fenómeno ocurre con la mayoría de las personas. Particularmente me dan grima ver a esos bichos volando sintiendo el riesgo de que choquen en mi cara. Por acá en mi casa me ganan en esta cobardía la esposa y las hijas quienes gritan como si vieran al mismo Mandinga cuando las ven como sea, caminando o volando.

2- El Coco: En realidad, al haberme convertido en un hombre de la cuarta edad, se extinguió mi temor al Coco, a ese ser fantasmal al que hacían referencia los adultos que me criaron. Sin embargo, a veces tengo pesadillas donde veo a ese ser maligno que quiere hacerme daño. Todo eso indica que el miedo sigue allí, escondido en el subconsciente.

Fuente

3- Animales venenosos: Más que miedo, lo que le tengo a las serpientes, escorpiones, avispas, rayas, etc., es un respeto absoluto. Distancia total con esos animales. Un caso lamentable ocurrió con un personaje de la TV muy famoso que solía interactuar con animales peligrosos, pero que llegó el día que, gracias a su excesiva valentía y confianza, una manta raya le perforó el corazón, y hasta ahí llegó Steve Irwin, el célebre “cazador de cocodrilos”.

4- La inflación en Venezuela: Cada vez que aumentan el dólar siento como si un escalofrío recorriera desde mis pies hasta la coronilla. Y es porque sobrevivir en Venezuela se ha vuelto una especie de pesadilla donde tienes que hacer malabarismos para poder cubrir las cuentas.

¿Cuando eras niño solías tenerle miedo a algo?

Como lo dije con anterioridad, le tenía terror a ese personaje ficticio y de ultratumba llamado el Coco. Aunque de verdad, a lo que más le temía yo era a una correa de cuero que tenía mi mamá destinada exclusivamente a la “educación” de sus querubines.

¿Cómo haces para vencer el miedo?

La mejor manera de evitar el miedo es mantenerse lejos de todo peligro o de todo aquello que nos atemoriza. En cambio, si se trata ya de algo patológico que se va al extremo, allí lo que conviene es buscar la ayuda profesional (psicólogo). Por ejemplo, cuando era adolescente conocí a un niño que se desmayaba del susto cuando veía pasar cerca de su casa a un indigente que se parecía a Pie Grande.

¿Alguna vez has dejado de hacer algo por miedo?

Cuando joven sentía aversión por las multitudes y padecía de miedo escénico. Cuando me tocaba exponer un trabajo en la escuela, lo que me provocaba era usar un pañal desechable. Pero a medida que fui madurando me di cuenta que eso no me convenía y tuve que enfrentarlo con vehemencia. Hoy en día a las grandes aglomeraciones de personas, aunque no me sigan gustando, no les temo. Y con relación al miedo escénico tuve que obligatoriamente que curarme de eso por haberme convertido en trabajador docente durante 20 años.

Fuente

--oo0oo--

Configurado con 15% a favor de @hive-181136
Invitación: @dulcem05, @eliany, @aplausos