Comer no es lo mismo que comer saludable y para ello debemos ser cuidadosos en seleccionar los alimentos que consumimos a diario para mantenernos sanos. Una alimentación saludable es aquella que incluye todos los grupos de alimentos como lo son: proteínas, lácteos, granos, verduras y frutas, con el fin de mantener una alimentación balanceada y recibir todos los nutrientes necesarios para el buen funcionamiento del organismo.

En lo posible debemos evitar alimentos procesados, azúcares y grasas trans, además de disminuir el consumo de sal y tomar al menos 2 litros de agua al día.

Todas las comidas no son necesariamente nutritivas, tal es el caso de la comida chatarra, porque solo tienen un aporte calórico de saciedad y sabor que nos agrada, más no nos provee de lo que realmente requiere el organismo para funcionar. Esto trae como consecuencia, una mala alimentación, desnutrición, obesidad, diabetes y enfermedades cardíacas.

Ahora bien, comer saludable incluye a un grupo de alimentos que tienen la propiedad de proporcionarnos los nutrientes necesarios para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo y mente. Cada uno de estos grupos de alimentos nos proveen de vitaminas y minerales que precisa nuestro organismo para ejercer sus funciones adecuadamente, de allí radica su importancia. Es decir, cada nutriente tiene una función, energética, presente en los hidratos de carbono, estructural, presente en las proteínas como las carnes y huevos, que favorecen a la formación de la masa corporal y mejora la salud cardiovascular y por último, ubicamos a la función reguladora, donde se ubican las vitaminas y minerales.