Grasp all, lose all

  Es un gran placer para mí unirme a la dinámica que ha organizado nuestro querido amigo @mostofajaman en la que, tenemos la oportunidad de hablar sobre las personas que de alguna manera u otra se acercan a nosotros solo por un objetivo particular. Sin más preámbulo, comienzo con mi participación.

  La interacción social es una actividad que diariamente las personas debemos desempeñar porque, a través de esta acción desarrollamos habilidades sociales e incluso, interpersonales para así poder desenvolvernos con éxito en los diversos escenarios de la vida.

  Gracias a la interacción social que realizamos diariamente, forjamos lazos de amistad con las personas que vamos conociendo y, a raíz de ello, descubrimos que existen personas buenas y malas por lo tanto, de nuestra parte queda seleccionar cual de las dos opciones queremos ser.

  Me caracterizo por ser una persona que le cuesta mucho creer que las malas intenciones forman parte de las actitudes de algunas personas y, debido a ello me he expuesto a situaciones desagradables por lo tanto, en diversas oportunidades he tenido que enfrentar este tipo de eventos y, sin duda alguna es muy desgastante a nivel emocional porque, sentirme usada por personas cercanas duele muchísimo e incluso, me atrevo a decir que molesta más que cuando la mala experiencia ocurre con personajes no tan cercanos a mí ya que, es más sencillo cortar relaciones con alguien distante que, con los amigos o familiares cercanos.

  Las experiencias desagradables me han enseñado que, jamás conocemos bien a las personas e incluso, ni siquiera a nosotros mismos porque, nuestras actitudes siempre van a estar estimuladas por las emociones que sentimos en un momento determinado. Partiendo de esto pienso que, no hay una manera exacta de conocer a las personas que tienen malas intenciones ya que, algunas lo saben ocultar muy bien y ya cuando nos damos cuenta, han agarrado todo lo que querían de nosotros.

  Sin embargo, durante la convivencia podemos llegar a ver ciertas banderas rojas que nos anuncian la posibilidad de que esa persona cuando logre su objetivo, nos hará de lado y para poder notar esas señales, hay que ser muy observadores ya que, las actitudes egoístas o egocéntricas van a resaltar en ciertos momentos y, es aquí cuando tenemos la oportunidad de ver qué es lo que realmente hay en sus intensiones hacia nosotros.

  Mi círculo cercano no es muy amplio porque, a pesar de que no tengo inconvenientes para conocer personas y socializar, soy muy selectiva al momento de permitirle a alguien que forme parte de mi vida ya que, para mi; la estabilidad de mi entorno es prioridad por ello, lo resguardo con mucho cuidado. Debido a esto, me siento muy bien con las personas que son cercanas a mi y, son amigos que aprecio muchísimo porque, cada uno de ellos a su manera me ha brindado su amistad, cariño al igual que familiaridad y cuando debo socializar con alguien que no me genera buena espina, automáticamente activo mi actitud observadora y precavida para evitar algo desagradable.

  De las personas que me rodean, lo primero que espero es respeto porque, esta es la base de una buena relación e independientemente de que seamos cercanos o no, hay que respetar y, nuestra interacción social debe ser genuina. Aunado a ello, honestidad hacia ellos mismos porque, si se acercan a mí solo por un interés, lo voy a descifrar en el momento que menos esperen y, más que ser yo la sorprendida, realmente van a ser ellos.

  Cuando el mundo del Marketing Digital estalló su auge, una persona cercana a mí me dice que le enseñe todo lo que sabía de ese tema porque, le parecía muy interesante y quería desempeñarse como Community Manager. Esto me pareció muy bien ya que, en ese momento una amiga y yo estábamos en planes para crear nuestro emprendimiento en esta área para ofrecer asesorías y realizar trabajos de CM por lo tanto; vimos que era una excelente oportunidad para contar con alguien más en nuestro equipo ya que, este tipo de trabajo no lo puede realizar una sola persona porque, es muy amplio y, que un detalle pase desapercibido, generaría que la estrategia se arruine.

  La persona aprendió todo lo que yo sabia a nivel de Marketing Digital y, mi amiga la enseñó a diseñar e incluso, otro chico le explicó cómo se toman las fotografías del sector gastronómico. Ahora bien, durante un año y medio, todo iba muy bien; o, eso era lo que nosotros pensábamos y, en el momento menos esperado, los clientes que teníamos se fueron retirando y posteriormente lo hizo ella.

  Hasta este punto, yo veía todo esto normal. Sin embargo, uno de nuestros clientes nos dijo que esa persona lo había contactado para ofrecerle los servicios de su nuevo emprendimiento y, le pidió que no nos dijera nada pero, esto le pareció tan desleal que sí lo hizo y, aquí fue cuando entendí que, esa persona nos utilizó y, no solo lo hizo desde el enfoque de aprendizaje sino que, llegó al nivel de arrebatarnos los clientes que teníamos.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!