Steemit Engagement Challenge S5-W3: Si solo

Esta frase: Si solo..., con solo anunciarse despliega un abanico de posibilidades que nos evoca muchas de esas situaciones, importantes o no, que en un determinado momento pudieron hacerse realidad, pero se quedaron inconclusas porque nos faltó dar el paso definitivo.

Cuando esto sucede, la interrogante sobre lo que hubiese ocurrido, en caso de nosotros haber hecho lo que las circunstancias exigían, se queda flotando en la memoria para recordarnos, de vez en cuando, lo que no hicimos... Steem for Betterlife, apelando a ese sugestivo planteamiento, nos invita, en esta oportunidad, a que mostremos lo que continúa después de nuestro más importante Si solo...

_{Imagen diseñada en PowerPoint}

Si tan solo me hubiese dedicado a escribir, solo a escribir, como lo pensé desde aquellos años de adolescencia cuando me apasioné por la literatura, hubiese quizás llegado a ser el eminente creador de universos ficcionales en que anhelé convertirme.

Sabía, a pesar de mi inexperiencia, que no era fácil, estaba consciente de que no solo se trataba de verter en unas cuantas líneas lo primero que se me viniera a la mente y que el oficio de escritor se convierte en un apostolado que debe ejercerse con paciencia y dedicación, sin embargo, la ilusión febril de aquel entonces me aseguraba, no solo que sí podía, sino que mi vida estaba irremediablemente atada a la literatura.

Leí, con ferviente admiración, a los grandes escritores de las letras españolas y latinoamericanas. De su experiencia aprendí que no solo es necesario contar una historia, relatar una anécdota, dentro de los estrictos parámetros de la redacción formal, sino que se debía buscar hasta el cansancio un estilo propio, una particular manera de expresar los hechos para no caer en los lugares comunes donde naufragan infinidades de supuestos creadores que nunca encontraron un modo distinto de expresar sus ideas. Y me dediqué a buscar ese camino de las palabras por donde jamás nadie había transitado.

Estaba siempre escribiendo, al igual que ahora, pero llegó la inquieta juventud con otras urgencias y me mostró mil formas de diversificar mis ilusiones y de estrenar pasiones que se renovaban con inaudita frecuencia. Entonces la escritura se convirtió en un artificio para cautivar ensueños que dejaban sus suspiros en el aire y se asombraban con pasmosa facilidad ante una metáfora desgastada. La literatura dejó de ser un trabajo empecinado que tanteaba una expresión genuina para solazarse con la obnubilación inmediata de los elogios carentes de profundidad.

Y así continuó la vida, imponiendo prioridades, separando la realidad de la fantasía y diciéndole al tiempo impertérrito que anduviera de prisa. Vino la universidad a señalarme que no era tan fácil aprobar el riguroso examen de sus exigencias para alcanzar un título, luego la familia me mostró la constelación de sus encantos, junto a las obligaciones que me ayudaron a ser imprescindible, y por último el trabajo de enseñar el idioma que, de vez en cuando, me sumerge en esa pregunta que no tiene respuesta: ¿Si tan solo me hubiese dedicado a escribir, solo a escribir, sería hoy un autor famoso?

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_{Invito a los amigos @samynathy, @paholags y @yulirosario27 a participar en este concurso.}

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_{Nota: Todas las imágenes fueron tomadas con la cámara de mi teléfono móvil, cuyo modelo es: LG-X240.}