Es un placer compartirles otro día más de mi vida a través de esta dinámica.

Hoy me levanté super emocionada porque iría con mi hermana al parque La Llovizna, lugar que extraño pues la última vez que lo visité fue cuando era una niña.

En la mañana, primeramente me dediqué a regar las plantas, darle comida a las mascotas y limpiar. Después desayuné y me arreglé rápidamente con una ropa cómoda y fresca para aventurarme en el parque jajajaja. Llegamos alrededor de las 10 a.m. gracias a mis padres quienes nos llevaron y ahí nos encontramos con los compañeros de trabajo de Carla, quienes también disfrutarían del lugar.

Cuando el grupo estuvo completo comenzamos nuestro recorrido. En la entrada del parque habían una gran cantidad de monos dandonos la bienvenida jajaja, donde algunos recibieron comida de parte de las personas. Yo aproveché y me tomé una foto con uno, dejando una distancia prudente entre nosotros 🤣

Continuamos el camino y como es costumbre mía aproveché para tomarme fotos con muchas cosas que me gustaban. Una de esas fue unas grandes piedras en la entrada y otro fue el camino sobre el agua, típico de este parque.

Admito que disfruté mucho la caminata rodeada de sólo naturaleza, de verdad que sirvió para recargar energías. Mi parte favorita de este paseo fue llegar al lugar de las cataratas, las cuales me transmitieron tanta alegría y frescura, tanto que pasamos un buen rato viendolas y tomándole fotos en distintas vistas.

A medida que continuamos el recorrido me sentía super bien. Lugares así ayudan a renovar energías y ejericitarnos, son ideales para pasar un buen rato.

Nuestra última parada fue en el sitio en donde se hace Kayak. Vimos como las personas recibían una clase y emprendían su aventura jajaja disfruté mucho verlos y quizás en un futuro podamos hacerlo también.

Después de nuestro paseo, decidimos irnos para almorzar. Subimos en un taxi rumbo al Centro comercial Alta Vista II en donde pedimos unas 2 deliciosas pizzas con refresco. Luego nos despedimos del grupo deseándoles un feliz año. Mi hermana, uno de sus colegas y yo nos fuimos a disfrutar de unas ricas barquillas de mantecado para culminar con broche de oro esta salida jajajaja

Luego mi hermana y yo nos fuimos para la casa bien cansadas pero felices. Admito que no pude ni cenar de lo llena que estaba, pues comimos un poco tarde esperando el taxi y la pizza. Sin embargo, fue un día excelente y único que quisiera volver a repetir.

De ahí me fui a dormir jajaja pues agoté todas mis energías. Agradezco a Dios por permitirme vivir otra agradable experiencia antes de que culmine este hermoso año 2023.