"SEC - S12W1: Un cuento antes de dormir: Un mundo particular"

Hace muchos pero muchos siglos atrás, cuando apenas se estaban formando los universos, y el polvo de estrellas aún no se había convertido en soplo de vida, Dios empezó a mover las galaxias como si de piezas de un rompecabezas se tratase.

Unas galaxias dieron más trabajo que otras, habían de tantos bonitos colores que iluminaban el espacio entero por si solas, y lo más bonito de todo es que al reunirse aquello que ni nombre tenía, se daba lugar a nuevas formas quedando impregnado “la esencia pura” en cada nueva formación.

Hubo un lugar en particular que, aunque hermoso, se había formado de manera densa, por los que sus habitantes debían tener densidad dentro de ellos para poder existir en este lugar.

Dios, como es generoso, permitió la formación de ese lugar aun cuando sabía que sus habitantes serían más complicados de crear que muchos otros espacios donde sólo se necesitaba “la consciencia invisible de lo que se es”.

Y llegó el momento de crear los seres que habitarían ese hermoso lugar, se necesitaron varios consejos multidimensionales para obtener el material necesario para formar sus habitantes.

• ¿Cómo haremos?, preguntó el supremo Dios
• No se trata de sólo formarlos, sino también de conseguir la forma de transportarlos a ese nuevo mundo que llamarán “hogar”.

Cada integrante de aquella maravillosa comisión dio ideas, cada una de ellas debía tener un sentido lógico para que los nuevos seres entendieran de donde provenían.

Y fue así, cuando todos coincidieron que se debían crear una especie de filtros para que estos nuevos seres pudieran descender hasta llegar a ese hermoso pero denso mundo, y así fue.

Inclusive uno de los últimos filtros debía ser otro ser que ya existiera en ese hermoso mundo, uno capacitado para poder formarlo y llevar dentro de sí ese otro nuevo ser hasta que fuera el tiempo preciso para expulsar a ese recién llegado al nuevo mundo.

• Cada uno de los seres llegará puro y limpio, dictó el Dios supremo
• Tan puro y tan limpio que no recordará que fue hecho de mí y que lleva la sabiduría del cosmos entero, tendrán dentro de sí la magia del polvo de estrellas, sólo que deberá descubrirlo por sí solo, y así fue.

Los primeros habitantes sentían un profundo respeto por todo lo que los rodeaba y efectivamente todo lo tomaban de allí, la vida era sencilla, laboriosa , llena de sentido y al irse devolvían con sabiduría todo lo que habían tomado de los alrededores.

Pero como todo en la vida, los años fueron pasando y más generaciones habitaron ese lugar, cada generación nacida se desconectaba más del mundo que los rodeaba y de la parte sublime que justamente lo ayudarían a descifrar uno de los tesoros más valiosos que cada uno llevaba dentro de sí.

Era increíble como el Dios supremo en su perfección ingenió los ciclos y las fases lunares, colocó pistas para que cada uno pudiera dar con ese secreto que cada uno llevaba en su interior y era así como en este mundo existía la dualidad como parte del equilibrio.

Había colores distintos en cada parte donde podían ver, arriba y abajo estaba hecho de matices que catalogaban como parte de la vida misma, algunos los llamaron amaneceres, atardeceres, noches estrelladas, alba y ocaso, primavera, verano, inverno, otoño, día y noche, tierno y avejentado, brisa, silbido del viento, aguas profundas y saladas, ríos de agua dulce, tantas cosas que existían y se presentaban de manera majestuosa cada día de todos los días.

Y aunque no lo crean, eso dejó de ser importante para muchos, lo tácito a veces se vuelve invisible, para otros recobraba sentido en las últimas partes de sus vidas y en algunos otros casos no lo llegaban a ver sino cuando dejaban ese mundo y se volvían a unir con el todo.

Entonces seguían allí, los mares de agua salada, los ríos de agua dulce, pero ya nadie los buscaba como antes, los días y las noches, pero ya nadie tenía noción del tiempo y su caducidad, lo tierno y lo avejentado, pero nadie lo veía en sí mismo, como si de seres inmortales se tratase.

El Dios Supremo incluso llegó a dudar de esta creación que tanto trabajo le había costado re-crear para que habitara en este mundo particular, recordaba como tuvo que adaptar cada cosa para llegar a la densidad necesaria para que estos seres especiales habitaran en él y ahora estos mismos seres se habían convertido en seres vacíos, carentes de esa búsqueda que los llevaría al tesoro más preciado que él había colocado en cada uno.

Sintió dolor, pero en el mismo momento que lo sintió se dio cuenta que tanto era el amor que sentía por esos seres que la esperanza prosiguió a ese dolor y fue así como no impidió que los seres especiales experimentaran al igual que él lo que era el dolor.

Para bien o para mal, algo debía pasar y fue así como se dio cuenta que había muchos seres que al pasar situaciones dolorosas se hacían más fuertes, sobretodo porque conectaban en su interior con aquel precioso regalo que cada uno llevaba dentro, eso, justamente eso, que era impalpable era lo que los conectaba nuevamente con su esencia divina.

También se dio cuenta que había otros seres que al pasar por situaciones dolorosas desarrollaban lo peor de sí, y se alejaban cada vez más y más del tesoro más preciado.

¡Entonces! Miren como son las cosas de la vida, del mundo, de las galaxias, del universo, del cosmos y del más allá de eso, que hasta el Dios supremo entendió que justamente cuando sintió que todo estaba perdido puede surgir la “esperanza” y aprendió que cuando los seres especiales sienten dolor puede nacer la posibilidad de que cada uno de ellos conecte con él, justo allí, en ese preciso momento cuando cada uno descubre “la consciencia invisible de lo que se es”.

Así que ... ¡nunca olvides!, aunque estés en medio de mucho DOLOR, no te dejes avatir, sólo hace falta sustituir par de cosas y verás como estás en perfecta capacidad, D-AMOR y verás como conectas con Dios.

Fin

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Nota₁: cada imagen fue hecha en Canva, haciendo uso de imágenes de Canva.
Nota₂: quiero invitar a mis amigas, @nahela, @marpa y @franyeligonzalez a participar en este concurso.