La vida está llena de hermosos momentos que producen en nosotros una montaña rusa con diferentes tipos de emociones. Muchos deseamos repetirlos porque nos hizo sentir alegres.

Sin duda SI, yo amo recordar momentos vividos hacerlo me lleva por unos cuantos minutos de vuelta al pasado. A veces miro mi álbum de fotografías y logra sacar una gran sonrisa y me revuelve todos los sentimientos vividos en ese momento. Los recuerdos me han hecho reír, me han hecho llorar.

Este año he vivido buenos momentos llenos de emoción. Les cuento: en enero pude cambiar mi teléfono por uno nuevo de más capacidad y con una pantalla más grande, de mucha más capacidad gracias a mi esposo que me regaló el que compro para el y se quedó con el mío. fui a la playa dos veces en enero y en julio, después de 5 años sin poder ir. A mitad de año me reactivé en la plataforma cosa que me ha parecido genial. En noviembre se casó una amiga muy querida. Y hubo otro momento maravilloso que más adelante les comparto que será uno de los mejores recuerdos del año que terminó .

Como ya mencioné fueron muchos buenos momentos que viví el año 2023 pero el mejor fue poder reencontrarme de nuevo con mi hermano menor quién tenía 5 años viviendo en el país vecino Colombia, siempre teníamos contacto por videollamadas o por WhatsApp pero nada es igual como estar en presencia. Y fue en el mes de septiembre el primer día cuando nos dió la sorpresa,no hubo momento de tomar fotos.

Así que el quiso hacer algo especial para nosotros y por eso nos llevo a comer algo rico , nos dijo que pudiéramos lo que quisiéramos con postre incluido y todo. Despierta de volver a casa nos quedamos charlando hasta muy tarde poniéndonos al día con muchas anécdotas.

No viene a mi mente ningún mal recuerdo del año que acaba de terminar lo único que podría mencionar que quedará grabado en mi memoria por muchísimos años es el hecho de que había planificado poder celebrar mi aniversario fuera de casa Y lamentablemente mi esposo enfermó y no fue posible hacerlo.

Sin embargo nuestros queridos amigos que siempre se han hecho presente en cada día de mi aniversario nos dieron la sorpresa y llegaron a casa con una torta y algunos pasapalos así que como decimos los venezolanos no pasó por debajo de la mesa fue un momento compartido muy bonito con ellos y con mi mamá pudimos comer reír charlar por un buen rato.