Habia una vez un corazón de peluche, quien llevaba mucho tiempo en una tienda pues no lo tomaban en cuenta. En la tienda habían muñecas, osos, almohadillas y diversos juguetes para la venta.

Corazón de peluche se sentía muy solo, todos los peluches lo rechazaban por ser distinto y su color rojo que lo marcaba. El pasar de los días hizo que corazón de peluche se llenara de mucha tristeza y perdió las esperanzas de hacer amigos en la tienda. Día tras día veía como los niños querían llevarse osos y las niñas las muñecas.

Un día como cualquiera la tienda abría sus puertas, el día iba normal pues corazón seguía en ella. Al caer la tarde cuando ya iban a cerrar, entro un joven y el corazón se quiso llevar. El corazón estaba contento al llegar a casa de su nuevo dueño, se percató que todo a su alrededor tenia su peculiar color.

Corazón estaba contento pues todos tenían distinto aspecto, había un globo y unas rosas, una gancheta y una gran bolsa, había un frasco, un álbum y una cesta quienes acompañaban a corazón en una gran mesa.

Una fotografía marcó la historia del corazón, ya que en ella encontró calor, una familia que lo aceptó y van mas allá de un simple color. De distintas formas se presenta el amor, solo es cuestión de prestar atención.

Nunca olvides la historia de corazón, en ella hay una gran lección. No hagas sentir mal a nadie, por su apariencia o por su color, pues todos somos iguales y rojos en el interior.