Así como lo expresas: “cuando se le hace un daño colateral a un tercero y viene el arrepentimiento”. Este tipo de daño deja huellas… claro en el momento la salida más adecuada que encontró tu mamá fue enviarte a otro lugar para ver si se le pasaba, me imagino cómo te sentiste cuando regresaste y lo viste en ese estado, todo el peso recayó. Lo positivo y valiente fue asumir que fue un error. arrepentirte fue lo más ideal y eras madura para hacerlo a una edad donde las chicas lo que les importa es su propia vanidad. Un gran aprendizaje: antes de tomar decisiones transcendentales, hay que considerar primero la responsabilidad que amerita tal decisión. Una linda publicación. Bendiciones