Una historia de despacho, pero más de amor, que me cautivo. Cada palabra se transformó en imagen en mi mente y como consecuencia sentí admiración por la sabiduría de tu papá y emoción por la suerte de Tulio por tener la dicha de ser amado por su leal Santa.
Esperemos que Tulio haya aprendido la lección de no pararle a los chismes.
Saludos, mi Sol. Como siempre, me iluminas con tus palabras.
Mi amigo querido, describí estos acontecimientos con el recuerdo vivo de la infancia, y contarlo me hizo bien, porque comprendí, aún más lo que dice Julio Jaramillo".
Pase lo que pase, debemos tratar de encontrar la verdad, y mejor si esta viene de la boca de los actores principales.
Gracias por este comentario tan lindo. Un abrazo.