Concurso | Amor en el balcón

La historia que les contaré no comenzó en un balcón. Comenzó en el tiempo y se desarrolla al pasar este por la vida de los implicados.

_{Portada creada en Canva}

Ellos se llevaban dos años de diferencia. Él nació un 9 de enero de 1998, ella un 1• de diciembre del 2000.

Crecieron compartiendo juegos, vacaciones, actividades escolares. Mantenían una distancia. Ella por ser la hija única, le exigieron esa distancia con él y sus hermanos.

Crecieron y llegaron a la adolescencia. Él llegó antes, claro está. Pero, no le agradaba ella ¿la razón? Era gordita. A leguas se veía cuanto él, le atraía a ella. Así que ella buscaba cualquier oportunidad para estar cerca y charlar.

Él, sin embargo le sacaba el cuerpo. Muchas veces él se quejó de que ella lo perseguía. Pero la madre de él, podía ver cualidades en ella que eran valiosas y la hacían ver muy bella. Así que en muchas ocasiones cuando él se quejaba, su madre le preguntaba ¿Te has fijado como ella es? Es una joven respetuosa y colaboradora ¿Viste como trata a los niños y a los ancianitos? Y muchas preguntas más.

El tiempo siguió su curso, él maduró más ella se preocupó por su figura. Se convirtió en una diosa griega en todo su esplendor. Fue allí que entonces él puso más atención a los comentarios de su madre y comenzó a fijarse en lo especial que ella era.

Él se entusiasmó en regalarle un lindo collar donde colgaba un pequeña Torre Eiffel y junto con eso, su declaración de amor. Lamentablemente él la había tratado con desprecio y ella vio oportuno descobrarse sus desplantes. Le dió un no, como respuesta.

Descubrió lo amargo del rechazo. Dejó de tocar la guitarra, comenzó a dormir mucho. Su madre se dio cuenta de lo cabizbajo que él andaba. Se tomó el tiempo de escucharlo y le dijo:
_ Seca esas lágrimas hijo querido. Te falta crecer y aprender. Ella rechazó tu declaración porque tú le hiciste desprecio primero, pero no te regresó la cadena... Entonces, hay esperanzas.

Pasaron unos días y vino un hambriento gato y se comió la mascota de la bella damisela. Estaba muy triste. Así que la madre del joven sugirió: llámala. Así lo hizo y ella sintió consuelo con las largas conversaciones que tuvieron.

El tiempo transcurrió, y un 1• de diciembre de 2018, ella lo abordó a él y le comentó: Hoy estoy cumpliendo mis 18. Vamos a guardar, en esta cajita imaginaria, esta bonita amistad que hemos desarrollado. Ahora quiero decir, sí a la declaración que me hiciste un tiempo atrás. Él estaba fuera de sí, no lo podía creer. Al llegar a casa le contó a su madre y recordó las palabras que ella le dijo antes.

Así fue como un 29 de marzo del 2019 sellaron una bella historia que comenzó desde que eran niños.

"El que persevera alcanza"

Y creo que sí hay que echar una ayudita.

Esta es mi historia para participar en el concurso que nos invita la amiga @Solperez. Me gustaría invitar a: @rayuela2, @franyeligonzalez y @pandora2010.

_{Autor: @Lunasilver |Fecha:24-08-2024| Mi logro 1}