Esta pintura cuando la miramos sin fijarnos en los detalles nos parecerá una pintura normal de una mujer sola, sentada a la orilla de una playa relajándose frente al mar, pero si nos detenemos a observar los detalles nos podemos dar cuenta de que realmente es un verdadero contraste con la realidad.

En esta interesante pintura se puede observar situaciones muy extrañas entre ellos una mujer muy similar a una sirena, sentada sobre una piedra en la orilla del mar, ya que las piedras son algo muy difícil de encontrar en la orilla de una playa, porque lo que siempre hay es mucha arena y observamos un mar muy tranquilo donde solo hay una pequeña ola finalizando la playa.

También observamos una especie de montaña a la orilla de la playa, algo que es muy difícil de encontrar pues precisamente las playas están a nivel del mar y lo más extraño es que sobre esa montaña pasa un río que desemboca en esa playa de manera enérgica en sentido contrario al oleaje.

Por otra parte, observamos que hay una sombra oscura donde finaliza la playa, sin ninguna justificación o causa, excepto la sombra que refleja la mujer.

Finalmente se observa detrás de la mujer una especie de calavera que se encuentra tapada con la arena como si fuera una tumba profanada (abierta) en plena playa, quizás sea la victima de la sirena.