Efectivamente todo comienza desde casa, hay radica el principal problema de toda la violencia que vemos durante años en las aulas escolares, y el bullying empieza desde casa siendo el primer ejemplo los padres cuando critican algún defecto físico de sus propios hijos y de las demás personas.

Hay que comenzar a tomar medidas sociales que ayude a frenar esta ola de violencia, pero el gran problema esta en convencer a muchos de estos padres ya que muchos de ellos ni siquiera le prestan la debida atención a sus hijos y creen que no es algo importante.

El estado debe invertir en programas de salud mental que ayude a los padres con los problemas psicológicos que puedan estar enfrentando sus hijos y esto no solo recae en los niños, los principales que deben cuidar su salud mental son los propios padres, porque la mayoría de las veces son ellos quienes traen del pasado arrastrando conductas violentas que aplican en casa y a su vez los hijos la aplican en el colegio. Saludos buena reseña.