De lunes a lunes/Semana 8/Héroes perezosos/ por @cruzamilcar63
Entre unos y otros, siempre será así
La verdad es que las dificultades por las que pasan algunos por causa de los teléfonos celulares son innumerables. Un amigo, por ejemplo, tenía dos chips en su móvil, pero cuando iba para su casa, siempre le extraía uno, el que tenía los secretos guardados. Como siempre sucede, hubo una vez que se le olvidó retirarlo y en el momento en que su esposa le descubrió varios mensajes comprometedores, lo primero que se le ocurrió decir fue: "Nooo, qué vaina, me traje el teléfono de Jesús, el que trabaja conmigo en el mismo escritorio que tiene uno igualito a este." Para mantener la mentira, tuvo que comprarle a su colega un teléfono idéntico al suyo, aunque de nada sirvió porque no había pasado ni una semana, cuando su compañera había descubierto todos sus embustes.
Recuerdo, apartando ahora un poco las anécdotas, que cuando la telefonía móvil comenzó a popularizarse, los primeros equipos eran demasiado costosos y, como es obvio, no todo el mundo se podía dar el lujo de adquirir uno. Algunos tremendistas comenzaron, entonces, a llamarlos, en lugar de celulares, apelando a la similitud de sonidos, ridiculares, y aseguraban con una convicción redundante que quienes cargaban uno, sobre todo enganchado en el cinturón como se usó mucho, pregonaban una inmensa ridiculez. Quienes asumían este punto de vista consideraban que ese aparato tenía mucha utilidad para un médico o en cualquier otra profesión en la que se necesitara la presencia urgente del experto, pero que la gran mayoría de las personas, no necesitaba de esos artilugios.
Yo, por mi parte, como amante de la tecnología y como un defensor de que debemos ser siempre ciudadanos de nuestro tiempo, pensaba que los teléfonos celulares habían llegado para quedarse y que, en el futuro cercano, se convertirían en artículos de uso corriente. No se trataba, de ninguna manera, de que quería dármelas de visionario, sino que imaginaba las enormes ventajas comunicacionales de un aparato que podía llevarlo a todas partes, por lo tanto, era factible hacerles saber a mis familiares, y a quien fuese necesario, sobre cualquier imprevisible contingencia. La realidad, la historia, ya ha marcado su rumbo con respecto al móvil y continuará escribiendo su inmensa influencia en nuestra existencia durante los siglos venideros.
Ahora bien, tal como lo asevera una participante de este concurso, @zorajaime, “las ventajas de la telefonía celular son todas, la desventaja como en todo es para el embustero.” Por supuesto, el aparato en sí mismo no representa nada negativo para los seres humanos, porque las personas responsables, las que se desempeñan atendiendo a las normas éticas y sociales que regulan nuestro proceder dentro del entorno en el cual convivimos, lo utilizarán como una herramienta invalorable, como un recurso que les ayudará a facilitarles la vida, por su increíble capacidad de comunicación y por el sinnúmero de aplicaciones que pueden obtenerse para realizar un sinfín de tareas, que están allí al alcance de nuestras manos.
Los individuos que tienden hacia el mal proceder, en cambio, tratarán de emplear los celulares para hacer realidad sus oscuros propósitos, para propagar mentiras o para planificar fechorías inimaginables. El mundo siempre será así: nada es bueno completamente, mientras existan personas que buscan desviar todo hacia propósitos desleales con tal de sacarles algún provecho particular.
Con respecto al contenido del video del periodista y narrador argentino Hernán Casciari, dentro de la misma perspectiva que hemos planteado anteriormente, podemos decir, o preguntarnos más bien, en cuanto a los héroes perezosos, si en verdad no existían en este reino en tiempos pasados, cuando no se habían inventado los teléfonos celulares. ¿Podríamos pensar, con seriedad, que la comunicación móvil despojó a los humanos de la necesidad de estar junto a sus seres queridos, que les revocó esa urgencia de tocarse, de abrazarse, de compartir el mismo espacio para decirse cuánto se aman? ¿Les mutiló la intención de realizar lo indecible para cumplir sus sueños? Creemos que no, porque, como ya sugerimos en líneas precedentes, habrá siempre quien muestre total indiferencia ante los eventos que acontecen a su alrededor por muy importantes que estos sean; y existirán seres eternamente entregados a sus compromisos, dispuestos a realizar cualquier acción, sin importar cuánto sacrificio represente, para hacer realidad sus deseos. Y esto será así en cualquier tiempo y lugar.
Invito a los amigos: @eudisdiaz, @by-aranza y @felixgarciap. A todos quienes deseen participar, por aquí les dejo el link del concurso
Nota: La publicación está configurada con el 15% para esta comunidad.
Tienes razón el teléfono es algo necesario hoy en día. Y se ha convertido en una herramienta de trabajo, muy buenos argumentos.
Saludos me gustó leerte amigo. Feliz tarde
me quedo con estas palabras muy acertadas amigo..eso sucede en cuentos, leyendas y en la vida real, mi aplauso para tí.
Gracias por su aplauso y por acercarse a mis publicaciones para comentar. Saludos y éxitos, amiga.
Hablando de ridiculares recordé que al comienzo algunos lo cargaban en el cinturón y eran de juguete.
Definitivamente la tecnología es beneficiosa dependiendo del uso que se le dé, el tramposo lo usará para la trampa y el correcto para comunicarse con los suyos.
Buenas reflexiones.
Así es, "todo es según el color del cristal con que se mire..." Gracias y saludos para usted.
Muy bueno tu post, no recordaba ya eso de los ridículares.
Yo tuve que comprar el grandisimo aquel, un motorola era gris con una antena grande. Pesaba mucho.
Cómo no había manera que cantv, pusiera teléfono allá, donde yo vivía, apenas salió al mercado lo compré era un Telcel, para que mi mamá pudiera estar comunicada.
Recuerdo también, que me criticaron hasta que se cansaron, y creo que a las 2 meses salió uno menos grande y compraron ese.
Y me salió costoso por lo del roaming.
Bueno, fueron los inicios de la telefonía celular en el país y, entre la necesidad y la novedad, se iba avanzando hacia la maravilla que hoy tenemos. Saludos y éxitos.
Qué buena suerte la del amigo que le compraron un celular nuevo, para tapar una mentirita ja,ja,ja. Recuerdo lo de las personas con el celular colgando en el cinturón, y también me acuerdo de más de uno diciendo que no necesitaba ese aparato, y tiempo después no se separaban de uno. Me gustó mucho tu participación. Saludos.