Indiscutiblemente son tres momentos vibrantes e irrepetibles. Así es la vida, cuando uno se da un tiempo para revisar lo sucedido es motivo de agradecimiento por la vida que hemos tenido. El tiempo de Dios es perfecto y lo que falta de vida. Ya llegará el momento del grado de tus hijos, sin duda será especial, así ha sido mi experiencia. Agradecido con la vida por regalarme esos momentos.
Gracias por compartir, ¡saludos y bendiciones!
De vez en cuando tu sabes nos da nostalgia y allí están esas fotos para recordarnos lo felices que podemos ser.