Enfócate en lo importante

Un saludo muy especial a la comunidad de Heartchurch y en general a la comunidad de Steemit, para mí es placer poder compartir contigo esta reflexión.

Empecemos, el discípulo de Jesucristo se caracteriza por una vida de servicio y humildad. Sin embargo, somos egoístas y pensamos más en nosotros que en otros. Cuando tienes problemas y dificultades, solo piensas en resolverlos y te olvidas hasta de los que tienes a tu alrededor.

Muchos cristianos estamos viviendo con un peso encima por las situaciones de la vida, que no nos deja avanzar, pasamos el tiempo tratando de salir de cada situación presentada y el enfoque es en nosotros mismos. En otras palabras, los problemas no te dejan mirar a otros para ayudarlos y bendecir sus vidas.

Estamos viviendo tiempos convulsionados, que solo hacen que enfoquemos la mirada en nosotros y no en otros. Hoy quiero compartir contigo esta reflexión titulada “Enfócate en lo importante”, estemos leyendo 1 Pedro 5:6-7:

6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; 7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
Pedro 5:6-7

Para enfocarte en lo verdaderamente importante, debes:

I.- Humillarte

Debes doblegar tu orgullo y tu vida a Dios, la Palabra de Dios es muy clara al decir que Dios resiste a los soberbios y da gracias a los humildes.

Humillarse es rendir tu vida a Cristo, es entregar esas actitudes de orgullo y soberbia a Dios. Y entender que con tus fuerzas no puedes hacer nada. Cuando una persona es humillada en público, esta persona siente vergüenza, porque su yo fue herido.

Humillarte ante la mano poderosa de Dios, es sentir vergüenza por el comportamiento que hemos tenido y dejar que sea Dios el que obre su perfecta voluntad en ti. Es someterse a Dios, primeramente.

Cuando realmente estás dispuesto a humillarte ante Dios, dice su Palabra; que Él te exaltará en el momento preciso. No tienes que estar buscarte ser exaltado, es Dios quien se encarga de eso y te exaltará en su momento. Pero primeramente debes humillarte ante Dios. En segundo lugar, debes:

II.- Depositar

Pero ¿qué vas a depositar? Todas tus ansiedades, todos tus problemas. ¿A quién? A Dios. ¿sabes? Los problemas de la vida te dan ansiedad, preocupación, angustia, y eso hace que pierdas el objetivo en tu vida de servir a otros. Te enfocas en ti mismo, en las soluciones que crees puedes tener ante las dificultades y pierdes el objetivo de confiar y depender de Dios.

Si tienes bastante dinero en efectivo, los puedes usar para adquirir cualquier producto o bien, pero al depositarlo en un banco, ya no tienes el control sobre ese dinero, ahora es el banco quien controla tu dinero. Ya no tienes que preocuparte si se pierde, lo botas o te lo roban. Porque ahora es el banco quien se encarga de él. Así mismo, debe ocurrir cuando tú depositas tus problemas y ansiedades a Dios, ya no tienes que preocuparte, porque es Dios quien está al control de tus problemas.

El enemigo eso es lo que desea, que no sirvamos al prójimo, que no confiemos en Dios. Por eso Dios nos dice hoy por medio del apóstol Pedro: que depositemos o echemos todos esos problemas, todas esas ansiedades sobre Él.
Es vaciar tu vida y entregarla a Dios, dejar que Él obre y no tú. Ese es el verdadero enfoque que debe tener nuestra vida, humillarnos delante de Dios y depositar todas esas cargas que no te dejan avanzar, a Dios. Y su Palabra nos da la razón por la que debemos depositar todas esas cargas a Dios, porque Él tiene cuidado de nosotros. Que más que Dios, quien cuidará de nuestras vidas.

Confiamos en el banco, que puede suceder cualquier cosa y podemos perder todo el dinero, pero no confiamos en Dios, quien no nos fallará. Por eso hoy te invito a confiar en Dios.

Cuando te enfocas en lo importante, y te humillas a Dios y le entregas todas tus cargas a Él, tendrás la oportunidad de ayudar y servir al prójimo, porque es Dios quien controla todas tus cargas.

Ya el enfoque no debe ser en ti, sino en el hermano, en el prójimo. Y ante una necesidad puedes ayudarlo. Recuerda, el enfoque no debe ser en ti. Tú debes humillarte y entregar tus cargas al Señor.

Dios les bendiga.

This is me