Antes de comenzar la continuación, les dejo el inicio de la historia, podría decirse el capítulo 1, lo encontrarán en el enlace :https://steemit.com/spanish/@mllg/reto12votos-semana-78-sos-el-sos-de-eileen. Fue publicado también en el Reto12Votos, pero en su semana 78.

Sin más dilación vamos con:

Su día finalizó como cualquier otro de su exigente y ya rutinaria vida. Se miró al espejo e inicio el ritual de quitarse el maquillaje y alistarse para dormir. La soledad de su cama aguardaba por ella. La ausencia de Robert se hacía intolerable en esos momentos. Hacía tan poco que se había ido. Recordó un mal chiste que podía aplicar a su situación:

^{Cuando se van por un divorcio entre la rabia y el odio, te sobrepones a su ausencia. Pero cuando tienen el mal gusto de morirse, los idealizas y cargas con la ausencia toda la vida.}

Ella se había mantenido fuerte e indoblegable ante el dolor, pero en apariencia. Botaba lejos los pensamientos, las emociones que la embargaban y seguía, sólo seguía como un robot que respondía a su programación. Ese robot era la Eileen que su familia aplaudía y abrazaba, la ejecutiva por la cual mostraban admiración y respeto los competidores, socios y empleados. La gran Eileen. Su papel y fama habían crecido dentro y fuera de la empresa de cosméticos creada por el Robert y en la que ella, por la insistencia de él, se había ido adentrando.
Recordaba las palabras de su suegra, refiriéndose al Robert, con el característico artículo delante, como corresponde a la gramática del catalán, su lengua materna.

^{Dios sabe lo que hace. Fíjate si el Robert no hubiese insistido tanto, que difícil hubiese sido la situación económica para todos nosotros, pero especialmente para ti, hijita.}

Y razón no le faltaba. Todos habían puesto el hombro en la joven empresa, una cadena de tiendas y la venta de franquicias. Todo un éxito. Pero todos comenzaron a depender de Eileen, la empresa y después de fallecido Robert de Eileen, la viuda. Y eso, apenas a sus recién cumplidos 30 años.

Eileen con Robert era principalamente la imagen de la firma. Su rostro hermoso y su glamour natural le habían concedido esa responsabilidad y privilegio. Todo el tiempo de punta en blanco y un maquillaje de primera, nunca se concedió la debilidad de llorar en público o mostrar su sencillez, que también le era natural.

Hoy después de arreglarse para dormir, se recostó en el sofá y seleccionó una película. Sabía que no podría dormir. Había sido un día demasiado intenso, de emociones desbordadas; además una inquietud nueva estaba surgiendo. Se sentía observada, pero cuando giraba el rostro no veía a nadie mirándola. Pensó que se trataba de sus emociones tan controladas que estaban a punto de explotar, pero también podía tratarse de espionaje empresarial.

^{[Fuente] (https://pixabay.com/es/photos/binoculares-observaci%C3%B3n-de-aves-431488/)}

Esta idea la hizo reír. Recordó al Robert, su discurso burlista y su sonrisa irónica.

^{Un espía siguiéndote, amorcito. ¿Espionaje empresarial de alto nivel?}

Y luego, cambiando la expresión a la dulce y apasionada oferta de amor

^{*Vine aqui. Fes-me un petó. (_{En catalán: Ven aquí. Dame un beso})}

Se durmió entre lágrimas, agotada de recordar y llorar. La ausencia aumentaba su presencia.

^{Continuará...}