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RE: Memento ad mortem. Periplos, Revista de Arte y Literatura. N° 6
Querido @juancar347, lamento no haber pasado antes. Mi conexión estaba más muerta que los esqueletos de ese impresionante artefacto que muestras en las fotografías.
Me gustó mucho este texto, no solo por la profundidad de tratamiento y la cálida percepción de la muerte, sino por su lenguaje: un español que bebe de las aguas del barroco. Un lujo haber contado con la gala de esta sintaxis en el sexto número de Periplos.
¡Gracias por haberlo hecho posible!
La presencia de este "Ángel" se me hizo claramente presente. Gracias por este texto divino, en verdad.
Estimada amiga @antolinamartell: este 'Ángel' siente un enorme placer en conocerte y agradece sinceramente tu amable comentario. Dicen por ahí (en realidad, figura en el guión que Franz Capra utilizó para su inmortal película Qué bello es vivir), que cada vez que suena una campana, un ángel ha conseguido sus alas. Yo no sé si llegaré algún día a conseguir las mías, pero si estas Navidades escuchas una campana en tu hogar, ten por seguro que, con alas o sin ellas, este agradecido escritorzuelo de tres al cuarto te desea lo mejor y muchos éxitos en el futuro, porque según he podido ver a pequeños rasgos, tú también lo vales. Muchas gracias y un fuerte abrazo
Mi estimada, Adriana: no hay que lamentar, al contrario, el agradecido soy yo. Para mí la escritura resulta un auténtico placer y disfruto escribiendo. Creo que la escritura, al igual que muchas otras cosas, tiene que ser no sólo fuente de inspiración sino también de experimentación. Hay que dejarse llevar por el instinto y beber en muchas fuentes, sean éstas barrocas o no, como bien dices en tu comentario. Me gusta pensar, además, que cuando escribo, tiendo la mano (metafóricamente hablando) a la persona que me lee. Era, menos perfeccionada, claro, el tipo de escritura que utilizaban aquellos periodistas-escritores que hacían verdaderos artículos en los periódicos y gacetas de finales del siglo XIX y principios del sigo XX, cuando la información era todavía Literatura. Ha sido un honor poder contribuir con este pequeño granito de arena y hacerlo junto a un equipo de tan grandes exponentes, como es el Equipo Cardumen. Muchas gracias y un fuerte abrazo