Comparto con todos los seguidores de #Retotop10 una experiencia personal, les cuento que todos los días salgo a ejercitar a un parque, pero siempre lo hago en la pista, esta semana cambie además del recorrido de la pista aumente mi esfuerzo caminando a otros lugares del parque y me encontré con algo maravilloso que brinda una oportunidad única, para iniciar a los tres reyes que tengo como nietos en el juego del ajedrez.

En el parque descubrí que se encuentran dos juego de ajedrez gigantes con figuras plásticas armables, el tablero es de rejillas igualmente de plástico. Y estaban solos, no había otros niños, por supuesto no perdí la oportunidad de llevar a los niños para que conocieran el juego y movieran las piezas que eran casi de su tamaño.

Los dos niños mayores ya tenían algo de conocimiento sobre el ajedrez, (uno de seis y el otro de 12) jugaron su partida, con todo lo que pueden discutir y pelear dos niños que tienen una diferencia de edad de seis años queriendo saber uno más que el otro.

Mientras esta batalla se desarrollaba me escabullí con el niño pequeño(cinco años) al otro juego de ajedrez a jugar en paz, los abuelos que lean me entienden.

El niño disfruto conociendo los nombres de cada una de las piezas, cargandolas para colocarla donde le corresponde su ubicación y tomando su lugar en el tablero.
La actividad le pareció muy divertida luego para evaluar si logro algo de aprendizaje saque todas las piezas del tablero para que él les ordene y logró hacerlo bien rapido sin ayuda.

Luego pasamos a los movimientos que corresponde a cada pieza, allí ya es más complicado y perdio el interes, por ahora solo quiere colocar las piezas y lo hizo en varias oportunidades, ya con el conocimiento consolidado lo podía lograr solo y ya estaba enseñando a otro niño que se acercó, me retiré y los deje; si observan bien al fondo de la fotografía hay aparatos para ejercitarse así que aproveche también de hacerlo sin perderlos de vista; mientras ello se divertían y aprendían yo me ejercitaba.
Este fue el primer dia, pero ya estoy retada a jugar una partida, ellos quieren regresar mañana.

Ahora los tres reyes me preguntan ¿por qué voy sola todos los días a divertirme y no los llevo?
La caminata que me lleva de una hora a dos aproximadamente se convirtió en cinco horas, cansada pero satisfecha por el objetivo logrado, niños bien cuidados, divertidos y no perdí mi rutina.