Cuando salimos de mi oficina, nos fuimos caminando a almorzar a algún lado, en el camino, me di cuenta que llevaba unos zapatos muy altos, las mujeres tienen esa idea que ser altas las hace ver mas sexys, no se, es complicado hacer un análisis ahora de eso, pero sabia que era pequeña, por alguna razón eso no le gustaba, yo prefería mirar lo que ella era, que me aportaba y en que persona me convertía, esos zapatos la hicieron sufrir por un rato. Cuando llegamos, noté que sus ojos eran marrones, no había notado ese detalle, se me hizo raro que lo pasara por alto, noté que la intimidaba cuando la miraba, pero se interesaba al hablarme, hablamos de muchos temas, pero yo solo quería hacerle saber que me gustaba, quería dejar claro, que mis intensiones eran buenas, era muy desconfiada en el amor, pero en sus ojos se veía que quería amar, que tenia mucho para dar, aunque retenía todo eso, trataba de no dejarlo ver por alguna razón, trataba de ser muy fría, pero a la vez trataba de dejar ver que no lo era, yo no sabia si era un juego, o si quería que yo viera ese potencial en ella. Al final le dije todo lo que quería con ella, nada de rodeos, creo que eso la sorprendió un poco, pero le gustó, me despedí de ella cuando tomó el taxi, yo solo me quede observando como se alejaba de mi, solo pensaba en que quería volver a verla, que todavía tenia ese deseo por besarla, por cobijarla en mis brazos, en que la deseaba y que quería quedarme con esa rosa blanca para no dejarla marchitar nunca mas…