Dura tarea la de esos cazadores. Imagino la emoción al volver a casa con la presa cazada, en esas ocasiones que el destino les depare toparse con algún meteorito. Muy interesante experiencia debe ser esa de encontrarse, ver y analizar objetos provenientes del cielo profundo. Ya mismo voy a leer sobre el crater de Yucatán. Saludos.