Hola... Nuevamente por acá, presentando el Ensayo # 5, es decir, el último; de la obra literaria titulada: "El varón domado" de la autora Esther Vilar

Link donde puedes leerlo... Haciendo click aquí

A continuación te presento los enlaces a los ensayos anteriores:

Ensayo # 1
Ensayo # 2
Ensayo # 3
Ensayo # 4

Ya solo restan tres capítulos, pero cargados de muy buen contenido e interesantes ideas, que pueden o no parecerte común; todo depende de la óptica con la que se le mire… Sin más, comencemos… Espero sea de tu agrado y puedas disfrutar de la lectura de este ensayo, así como me he permitido disfrutarlos todos y cada uno al momento de elaborarlos.

Capítulo 21: La mujer “emancipada”

La mujer que continúa trabajando después de los 25 años: Se ha casado con un fracasado, es estéril, es fea, es una mujer emancipada o está interesada en determinada profesión.

Ahora bien, solo la mujer hermosa se puede emancipar (puede que tenga uno o dos hijos, para que su vida sea “plena”). La mujer emancipada suele frecuentar sitios de personas ricas e interesantes.

Ya no competirá contra mujeres, sino contra hombres. Gastara todo su dinero en sus disfraces y máscaras; y si se llega a casar, su marido disfrutara porque no cargara con toda la responsabilidad (supuestamente).

*Nunca pasara de moda el discurso femenino que dice: “Si me supero profesional y laboralmente, no puedo buscarme un esposo que este por debajo de mi estatus”. Bien, ahora pregunto: ¿Y cuando sucede lo contrario? Da igual verdad.
*La mujer fea: ¿Está obligada a emanciparse? Es decir, con tan poco atractivo difícilmente pueda encontrar a su esclavo laboral.

Capítulo 22: Women´s Lib

Esther Vilar describe la explotación del hombre norteamericano y como se va replicando por todo el mundo, a través de quienes culturalmente copian el modelo. No duda en afirmar que su suerte es peor que la nuestra a nivel de amaestramiento (esto parece ser lo que siempre han llamado el “sueño americano”)

Cito (p.90):

El norteamericano sabe que la felicidad no puede venir sino de la mujer y que las mujeres cuestan dinero. Está dispuesto a pagarlo. Paga por anticipado durante su juventud, al contado durante la fuerza de su edad y por diferido cuando ya está muerto.

A su vez, la autora describe, a la mujer norteamericana como la mejor pagada del mundo, a través de explotar más y más a su marido, con todas las comodidades existentes e inexistentes; y que dicho modelo también se va copiando poco a poco en todo el mundo.

El título de este capítulo, viene dado por el Movimiento de Liberación de las Mujeres, que por casualidad también fue iniciado en los Estados Unidos, y está conformado por las mujeres más feas de la sociedad. Dicho modelo también se ha replicado a nivel mundial.

Las mujeres hermosas que se han sumado a este movimiento, lo hacen con la única intención de liderar el mismo (obviamente la mujer hermosa resaltara muchísimo en medio de todas las feas).

La mujer que trabaja, necesita un hombre que también trabaje; no sucede igual en forma contraria.

*Este capítulo trae a mi mente la gran mayoría de películas de Hollywood ¿Y usted qué opina?
*Una mujer fea, deberá buscar la forma de reclamar las reivindicaciones que no le garantizara ningún esclavo laboral, por su poco atractivo físico.

Capítulo 23: ¿Qué es el amor?

Para resaltar los conceptos que quiere trasmitir la autora, voy a citarle en múltiples ocasiones.

(p.98):

El hombre está amaestrado de tal modo por la mujer que no puede vivir sin ella y hace, por lo tanto, todo lo que ella le exige. Lucha por la vida y llama a eso amor.

(p.99):

Para la mujer, amor quiere decir poder; para el varón significa sometimiento. Para la mujer, el amor es un pretexto de la explotación comercial; para el varón es una coartada emocional para justificar su existencia de esclavo. «Por amor» hace la mujer las cosas que le son útiles, y el varón las que le perjudican. La mujer deja de trabajar «por amor» cuando se casa; el varón, cuando se casa, trabaja «por amor» para dos. El amor es para las dos partes lucha por la supervivencia. Pero una de las partes sobrevive sólo si vence, y la otra sólo si pierde. Es una ironía el que las mujeres se hagan con sus mayores ganancias en el momento de mayor pasividad, y que la palabra «amor» haga irradiar de ellas el halo de la generosidad incluso cuando más despiadadamente están engañando al varón.

*¿Quién puede brindar un concepto real sobre el amor?
*¿Existe el mismo término del amor para el hombre y para la mujer?

A manera de conclusión, es necesario recordar que esta obra literaria fue escrita en el año 1971, por una mujer (Esther Vilar); su lectura puede gustar o no a las mujeres, ya que la autora logra quitar las vendas de los ojos al concepto que históricamente el hombre ha manejado de la mujer, quien siempre le ha calificado como el ser menos inteligente, desvalido, sensible, débil, etc; demostrando pues, todo lo contrario.

Ciertamente todo el mundo puede afirmar que la sociedad en general ha sido machista desde la existencia humana, ¿y quién tiene la culpa?

Usted puede dedicarse a leer el libro desde el enfoque que desee: Religioso, político, cultural, social, económico, sexual, etc; y posiblemente sus conclusiones tengan algo en común.

Las características y criterios pueden variar, depende mucho de la sociedad desde donde se le mire… Jamás podrán concluir lo mismo los hombres Norteamericanos, que los Europeos; ni estos igual que los Sudamericanos y así pare usted de contar.

La carne es débil, quien domina el deseo de la carne, puede manipular las sociedades a su antojo.

Considero la lectura de la obra literaria: El varón domado, un buen aporte para la plataforma y contenido de calidad. Sería incapaz de afirmar que ya todo está dicho, y que he abarcado todo el libro a plenitud; por el contrario aún existe muchísimo material valioso que puede explorarse dentro del mismo.

No dudes en desarrollar libremente tus ideas a través de los comentarios.

Por último, me atrevo a cerrar esta serie de cinco ensayos, citando a la autora (p.99):

Sólo las mujeres podrían romper el círculo infernal de la doma y la explotación. No lo harán nunca, porque no tienen ningún motivo racional para hacerlo. Y no se puede confiar en sus sentimientos, pues las mujeres son frías emocionalmente y no sienten compasión. Y así el mundo se irá hundiendo progresivamente en esa cursilería, en esa barbarie, en ese cretinismo de la feminidad, y los hombres, soñadores admirables, no se despertarán nunca de sus sueños.

Este ensayo nace de mi puño y letra, contando así con todos los Derechos de Autor, Registrados ante la Sociedad de Autores y Compositores de Venezuela (SACVEN), bajo el número de Socio: 8.115

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