En el episodio 3 de la segunda temporada de Luke Cage, "Wig Out", una de las últimas escenas muestra la semilla de la violencia doméstica en la relación de Luke y Claire, dándole la medida justa de relevancia a acciones que la sociedad ha normalizado y consideramos propias "de hombres". Sin embargo, esta serie nos muestra la gravedad y las consecuencias de este tipo de acciones.

Al final del episodio anterior, Luke pierde el control y casi mata a un agresor que golpeaba a su esposa y a su hijo. Luke buscaba obtener información de este hombre, apodado "Cockroach", y por esa razón lo siguió hasta su casa y supo de los abusos que sufrían su esposa y su hijo. Más adelante, una vecina lo llama y le advierte que "Cockroach" arremetió contra su familia, por lo que nuestro protagonista va al rescate (como buen héroe que es) pero la situación se le sale de las manos y cae presa de su ira.

La ira retenida en el héroe de Harlem es producto de un cúmulo de cosas: su relación con su padre, quien está buscando tener contacto con él nuevamente; la droga llamada "Luke Cage" que afecta muchas familias en Harlem y la imposibilidad detener su contrabando, pues como él mismo lo dice, es "dar golpes al agua". Cuando se deshace de un grupo, aparece otro a distribuir la droga. También lo afecta la responsabilidad que siente como héroe del barrio y como hombre.

Es en este punto donde Claire se da cuenta de que algo anda mal con su novio. Entiende las emociones que lo abruman y que su ira está retenida; también entiende que él está alimentando esa ira al no canalizarla y solucionar la raíz del problema (hablar con su padre, reparar la relación con él). Cuando Luke golpea salvajemente a "Cockroach", entiende que está llegando a un punto de no retorno. Como siempre, ella busca ayudarlo y le dice lo que piensa. Ante esto, Luke muestra molestia y siente que su masculinidad es amenazada.

Fuente

En esta discusión, Luke expresa que ser un "héroe rudo" no tiene nada de malo y es beneficioso para él porque es temido. Claire deja en claro que Luke se está convirtiendo en un hombre brutal y, lo que es peor, disfruta serlo. Él reacciona a la defensiva preguntándole por qué ella pone en duda su virilidad, a lo que Claire le responde: "Si golpear tu pecho por la ciudad es lo que necesitas para llamarte 'héroe', entonces cuestiono tu entendimiento de la palabra".

Luke pretende desviar el tema hablando de racismo, y de cómo la gente siempre ha sentido miedo de él por ser negro, implicando que Claire nunca ha tenido que sufrir esto. Ella le responde que es afrocubana y sabe muy bien cómo el racismo puede afectar a las personas y cómo son vistas, incluso cómo influye en la percepción que tienen de sí mismos. Sin embargo, esto no puede usarse como excusa ya que la gente "se sobrepone a las etiquetas". Luke dice que un hombre negro sólo tiene 2 opciones, o ser temido o ser amable y mostrar una sonrisa todo el tiempo; Claire le responde que eso es como decir que una mujer sólo puede ser prostituta o ama de casa: "no es tan simple".

La discusión llega a su punto álgido cuando Claire menciona que fue a visitar al padre de Luke a la iglesia donde él trabaja como reverendo, y que él no es el ogro que Luke piensa. "Dios perdone que haya cambiado y ya no lo puedas usar como excusa para alimentar tu ira", le dice Claire. Es en este momento cuando Luke pierde los estribos nuevamente. "¡Suficiente!" y acto seguido golpea la pared varias veces, dejando un agujero en ella.

Fuente

Fuente

A este momento lo sigue un gran silencio. La expresión horrorizada de Claire y el rostro de arrepentimiento instantáneo de Luke lo dicen todo. Todos sabemos lo que significa ese agujero: Luke golpeó la pared para no golpearla a ella. Esto es importante y una señal inequívoca de violencia. La serie no pretende justificar las acciones de Luke por ser hombre ni tener superpoderes, al contrario: nos muestra que, al realizar esta acción, cruzó la línea y marcó el final de la relación.

Claire rompe el silencio con una sola frase: "Necesito el océano". Ella debe alejarse, estar con su familia, salir de lo que puede convertirse en un ciclo de violencia. "Ese agujero que hiciste en mi pared... esa fue mi infancia. Y me prometí a mí misma que jamás volvería a vivir eso".

"Tú sabes que nunca te haría daño, ¿cierto?" le responde Luke. Una afirmación muy común en los agresores.

Nuevamente hay silencio y ella coloca una mano sobre su mejilla. "Tienes que irte ahora mismo".

Claire está sufriendo. Ella lo ama, y sabemos que él a ella. También sabemos que Luke es un buen hombre y desprecia la violencia de género; sin embargo, su temperamento se ha llevado lo mejor de él y ha caído en lo que tanto desprecia. Su arrebato de violencia contra la pared de Claire marcó un antes y un después en la relación de ambos, y él sabe que esto es algo que no puede deshacerse. Sí, Claire sufre, pero sabe bien que no puede dejar pasar esto ni permitir que la relación continúe en este punto.

Fuente

Confieso que, al ver esta escena, lloré. Al igual que Claire, de niña sufrí violencia doméstica en mi hogar, y sé exactamente qué significa ese agujero y por qué la afectó tanto. Las palabras de Claire son eco de aquello que les he dicho a las parejas que he tenido. "Crecí en medio de la ira y la violencia; no permitiré que esto suceda de nuevo".

Agradezco enormemente que esta serie se haya tomado la molestia de ejemplificar qué es la violencia doméstica, no sólo en sujetos evidentemente abusivos como "Cockroach", sino cómo puede manifestarse en un hombre bueno (un héroe, incluso) como Luke.

Ese agujero en la pared es un agujero en el rostro, en el corazón y el alma. Es un agujero que puede matarte.