¡Saludos! Hoy fui al mercado y me topé con un producto que llevaba tiempo buscando, pero que extrañamente nunca había tenido la oportunidad de comprar: Pepinillos frescos.
No estaban ni remotamente en mi lista de compras, pero no iba a desaprovechar la oportunidad, así que agarré una bolsa y los metí, sabía que en la casa tenía unas semillas de mostaza, azúcar, sal y vinagre, un par de frascos de vidrio con tapa de botón y con eso ya estaba listo para armar mis pepinillos agridulces

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Algunas consideraciones básicas que debemos tener en cuenta: Lavar nuestras manos y los utensilios que vamos a usar, tener nuestra mise en place, es decir, todo lo que vamos a necesitar para nuestra preparación y sobre todo, disponer del tiempo necesario, que aunque es una preparación bastante sencilla, las cosas no quedan bien si las hacemos apurados.

Lavamos bien los pepinillos (yo los dejé en agua durante 40 minutos) luego los escurrimos y los cortamos en cuartos de un extremo a otro, o bien los cortamos en rodajas. En esta oportunidad los preparé de ambas formas.
Al mismo tiempo ponemos una taza de vinagre, dos tazas de agua, una cucharadita de sal y una cucharada de azúcar y las semillas de mostaza (opcionales) en una olla y la llevamos al fuego hasta que hierva.

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Los colocamos en los envases que previamente esterilizamos (nada del otro mundo: ponerlos en una olla con agua hirviendo con sus tapas, esperar unos 5 minutos y sacarlos con cuidado de no quemarnos o en un esterilizador de teteros, si disponemos de uno) cuando el agua con vinagre haya hervido, la vertemos en nuestros frascos dejando un espacio de aproximadamente medio centímetro
Aun calientes, les ponemos las tapas cuidando que su contenido no se derrame (en este punto conviene usar guantes de cocina o un paño limpio y seco para evitar quemaduras). Inmediatamente llevamios los frascos a la nevera para que la diferencia de temperaturas haga que el aire caliente dentro de los frascos salga y se cree un vacío que evitará la reproducción de bacterias que echarían a perder todo nuestro trabajo.
Cuando los envases estén fríos ya se habrá creado un vacío y solo tenemos que esperar una o dos semanas a que el vinagre haga su efecto y los pepinillos estén encurtidos. Siendo un encurtido que además está envasado al vacío, esta preparación puede durar varios meses sin siquiera estar en refrigeración.

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¡Eso es todo! ¿Qué están esperando? Vayan a hacer los pepinillos, que están de temporada y dudo mucho que, al menos por esta vía, encuentren una receta más fácil de elaborar.
Muchas gracias por leer, recuerden que cualquier duda o sugerencia que tengan me la pueden hacer llegar en los comentarios y gustosamente se las responderé. ¡Hasta pronto!