Muchas veces, solemos dar por sentado que el neurodesarrollo es un proceso de exclusividad biológica, sin embargo, la realidad diverge mucho de esa premisa. Lo cierto es que, el desarrollo cerebral es en extremo sensible a los factores sociológicos de nuestro entorno. En este post, intentaré explicar un poco el papel de diversos factores ambientales y culturales que actúan a través de los biológicos modificando así nuestro neurodesarrollo.

Un claro ejemplo de cómo los factores socioeconómicos modifican los factores biológicos es el siguiente:

La pobreza favorece las carencias nutricionales:

La ausencia de educación alimentaria incide conlleva a dietas pobres en fruta, legumbres y verduras para los niños de bajos estatus socioeconómicos, y por el contrario, excesivas en azúcares refinados y grasas. Debido a que, en la mayoría de los países de cultura occidental, es más caro comer frutas y verduras que comida rápida.
Esto favorece la obesidad, que causa alteraciones en el hipotálamo –la región del cerebro que regula la actividad hormonal, entre otras–. Además de ello, estos niños, suelen disponer de un estipendio bajo en hierro, componente esencial en la síntesis de neurotransmisores –sustancias químicas con las que se comunican las neuronas entre sí–, que cuando son deficientes durante el neuro-desarrollo se altera la madurez cerebral.

FUENTE DE IMAGEN: https://neuropediatra.org/2015/10/17/cerebro-y-pobreza/
Para entender mejor, podríamos analizar el estudio elaborado por científicos de las universidades de Michigan, Duke y Wisconsin (EE UU), en el cual analizaron el desarrollo cerebral de los menores a partir de resonancias magnéticas llevadas a cabo durante toda su infancia y obtuvieron como resultado la pobreza puede afectar las conexiones sinápticas en el cerebro al observar un desarrollo estructural atípico en varias áreas cerebrales en niños de bajos recursos.

Los resultados específicos del estudio arrojaron que, la materia gris del cerebro en el lóbulo frontal, lóbulo temporal y el hipocampo de niños y niñas pobres es hasta un 10% menor que los niños y niñas criados bajo mejores condiciones económicas.

Cabe destacar que en el momento del nacimiento, los cerebros de los niños de padres en situación de pobreza son iguales a los de los demás niños. Las diferencias emergen a los 2 años de edad.

Además, Las condiciones económica desfavorables también afectan el desarrollo psíquicas y sensoriales del menor; puesto que un bebé necesita recibir caricias y mimos constantemente para una liberación óptima de hormonas tiroides, y con ello, el crecimiento normal del cerebro. Sin embargo, las personas con bajos ingresos necesitan dedicar muchas más horas a trabajar para sostener una fuente de ingreso que les consienta vivir dignamente, lo que disminuye el tiempo para dedicar a sus hijos en edades clave para el crecimiento.

Además, ¿podemos afirmar que la pobreza produce cambios cerebrales a largo plazo?

Por supuesto, diversos estudios indican que el cerebro de una persona en condiciones de pobreza a la larga manifiesta problemas como déficit de atención, mala memoria y envejecemiento cerebral.

Ahora bien, no podemos dejar de preguntarnos ¿Déficits neurológicos traen consigo más pobreza?

La respuesta es sí.

Una persona que atraviesa una situación de fracaso escolar por padecer, por ejemplo, Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDA-H) y nunca haya recibido la atención y/o monitoreo necesarios, al culminar sus estudios tendrá menos probabilidades de conseguir un empleo con alta oferta salarial. Lo mismo podríamos suponer que le ocurre a muchas personas con discapacidades físicas o mentales como Parálisis Cerebral Infantil (PCI), autismo, discapacidad intelectual.

Este post tiene como finalidad destacar cómo diversos factores sociológicos inciden en el desarrollo de los niños, y reflexionar un poco sobre cómo está estructurada la sociedad actual, donde cada vez hay más niños en condiciones no aptas para un buen desarrollo.

Debemos aportar nuestro granito de arena para ayudar hoy a quienes representan el mañana.

Espero haya sido un post nutritivo para ustedes, ¡saludos!