Había mujeres para mí, en  el pecho.

Soy lo mismo que quemaste en mi corazón,
Y los cíclopes decoran un solo ojo.
Y antes de que alguien te cierre la puerta.
Por el hecho de que él irá tras ella.
Y lo sacrificarán.
Donde las tareas son extremadamente simples.

En las sangrientas heridas del dragón se encuentra.
¿Qué fue ese verano?
Era ciego, de ahora en adelante se convirtió en espectador.
Y me estaba derritiendo como la nieve.
Tengo mucho miedo, de repente te enojas.
Me escribes, amor, sobre el ascenso desde el alféizar de la ventana.

Y luego me miraste con mis propios ojos.
Estoy harta de su luz triste
No sé cómo disipar esta carga,
Debajo de mí está el mar.
¿Dónde hornean el pastel con arena dorada?
Y el mar me arrastrará.

Ella tomará y tomará la copa.
Pero mientras el corazón en las alturas está llamando,
¿Eres una ventana? Rompo tus escudos
Olvidó lo que debería hacer y lo que podamos.
Estamos hoy, en mi opinión, prohibido enamorarnos,
Eso se alza.

Flotará en la nube, jugueteará, se ahogará,
Y por la tarde me convierto en la caprichosa mademoiselle.
Soy el diablo que creó su infierno.
Y entre los ciudadanos del mundo,
Detrás de los días pasados está el vacío.
Y todas las mañanas trato de encontrarte un taxi.

A los gritos de la multitud diabólica.
Tiempo de descanso en metal.
Están cansados de morir.
"En el universo, todo está pasando".
Me quedaré un rato
Y el alma no sabe nada...