Reflexión del día ¿Realmente soy tolerante?

La tolerancia es una virtud humana que nos gusta ver en los demás, especialmente cuando deseamos que sean tolerantes con nosotros o con las causas que apoyamos. Está de moda defender valores como la inclusión, la no discriminación y los derechos para todos. Todos estos conceptos los encerramos bajo el de la tolerancia y damos por sentado que si exigimos eso de los otros, obviamente nosotros también la practicamos... Pero, ¿es realmente así?

Vamos por parte. En primer lugar dejemos claro de qué estamos hablando cuando nos referimos a el término "tolerancia" y de cómo se practica y cómo no, para luego poder identificar si realmente estamos siendo coherentes entre lo que esperamos ver en los demás y lo que nosotros mismos vivimos.

La tolerancia, según Omar Izaguirre, se manifiesta de dos distintas aunque complementarias maneras: Es aceptar al otro tal como es, sin querer cambiarlo; es también respetar la opinión, manera de pensar, manera de ser, manera de ver las cosas, etc del otro, aunque eso no implique estar de acuerdo ni apoyar eso que estoy respetando. Ahora bien, esa es la parte más fácil, ya que por lo general aplicamos esto a los demás: los otros deben aceptarme como soy y deben respetar mi manera de pensar y de ser, así como no deben discriminar a aquellos grupos sociales que yo apoyo. Eso está muy bien; pero ¿qué hay cuando soy yo quien debo lidiar con una opinión contraria a la mía?

¿Qué pasa cuando alguien dice abiertamente algo que a mi me parece intolerante? ¿Cómo respondo? La respuesta a esa pregunta, es la clave para contestar la pregunta que da el título de este post. La reacción que tengas ante una situación como la planteada, es la que va a determinar si realmente eres una persona tolerante o si solo lo exiges a los demás, mientras tú practicas la intolerancia. Voltaire dijo algo así: "No estoy de acuerdo con lo que dices, pero moriría para que puedas tener el derecho de decirlo". Eso es tolerancia en acción. Les pongo un ejemplo:

Supón que soy un activista que defiende los derechos de X minoría, aunque yo mismo no pertenezca a ella. En la sociedad actual, dicha minoría es ampliamente aceptada por la mayoría, así que en líneas generales casi nadie me lleva la contraria. Yo me considero por esta actividad, una persona abierta, tolerante, que practica la no discriminación de las personas basadas en su condición (política, sexual, racial, económica, religiosa, etc). Un día, alguien en una reunión de amigos, dice abiertamente que no está de acuerdo con el estilo de vida que practica el grupo que yo defiendo, a lo que yo me enfurezco, descalifico a la persona llenándola de insultos y amenazo con irme de la reunión a menos que se vaya esa persona. Pregunto, ¿Actué de acuerdo con lo que es una persona tolerante? ¿Acaso esta persona no tiene derecho a pensar diferente de mí? ¿Acaso no tiene derecho incluso de estar "equivocado"? La tolerancia que exijo, ¿no debo también darla?

Ser coherente

Es aceptar que no todo el mundo tiene que pensar igual que yo, por más justo que a mí me parezca mi punto de vista. En un caso como el anterior, si se es requerida nuestra opinión, la decimos; "no estoy de acuerdo con lo que dices, respeto tu opinión y tu derecho de expresarla, pero la mía es esta..." Y ya. No hay insultos, descalificaciones, peleas ni grandes conflictos, Se discuten las ideas con argumentos y no se ataca a las personas por pensar diferente.

definicion.de

Y tú, ¿Qué opinas? Te garantizo respeto si tu opinión difiere de la mía.

¡Feliz día!