Aceptamos lo que creemos merecer 2da parte / ¿ A quien oír ?

¡ La luna iluminaba la ventana de su habitación!. Mientras en silencio pensaba.

• El brillo de mis ojos ya no esta, mis caderas me delataran? que habría de decir mi madre?...

• Todas las personas seguro lo notaran...

Una lluvia de dudas llenaban mi cabeza como no si David... asi es David se llama el chico a quien le entregue lo mas preciado
ahora la verdad no se si todo esto valió la pena o si simplemente me deje llevar por el momento a lo mejor Dios lo mando para que formara parte de mi vida y yo de la suya.

En medio de este mar de interrogantes oigo un ruido y me asomo por la ventana, solo apreciaba una sombra alta, delgada que al acercarse pude identificar y si, ¡era él! justo allí bajo mi ventana lanzaba pequeñas piedritas para captar mi atención, al verme me señala que baje es cuando de un brinco saliendo de toda esta tortura de remordimientos se coloca unos pantalones ajustados y un abrigo y me dispongo a estar con él.

Sin percatarse su corazón ya sabia que el estaba allí tan solo tomo un suspiro profundo y bajo las escaleras cuando por fin esta en la puerta principal del edificio fue recibida con un beso el cual erizo todo su cuerpo, él solo se alejo y dijo:

• Necesitamos hablar

• ¡Vamos! y tomó su mano

  Este dulce ángel de nuevo es llevado por este hombre, caminaron y se sentaron en la banca de un pequeño parque de la esquina el dulce ángel relato que:

El silencio invadió el lugar hasta que yo con una palabra decidí romper el hielo

• ¿Estas contento?
  Él sin pensarlo solo respondió

• ¡si!

  Un mar de lagrimas lleno mis ojos y no lo pude contener, el solo me abrazo y fue allí donde entendí que ese chico que todos veían como un ser oscuro era un ángel, pero que el destino y las circunstancias de la vida se encargaron de cortar esas enormes alas, fue tan solo la calidez de aquel abrazo lo que basto para que mis lagrimas desaparecieran y pudiera conversar con él.
  Pasaron los minutos, las horas y me hacia reír, me hacia reír de verdad, me hacia reír a carcajadas y el se veía contento al verme reír. la noche se paso volando y cuando reviso mi reloj ya eran pasadas la 11:00 pm, y es cuando el me dice.

• Vamos te llevare a casa

Tomo mi mano y me guió por el camino a mi edificio haciendo planes entusiastas del monton de cosas que haríamos al día siguiente.

Pasaron los días y ya se habían convertido en el compañero uno del otro, habían creado su propia rutina y en realidad esto es un relato de la vida real...o a lo mejor no... pero para todas aquellas personas que lo leyeron quisiera dejar esta reflexión

Nada es perfecto, aveces lo que comienza bien termina mal o lo que comienza mal termina bien, en realidad no nos podemos dejar guiar por las apariencias ni prejuicios y cuando de verdad se quiere a alguien, nos adaptamos y buscamos sus virtudes para aprovecharlas en pro de la relación, a lo mejor estamos en una relación equivocada o talvez es la persona que estará en el transcurso de toda tu vida, eso no lo sabemos, solo sabemos que hoy somos felices a su lado y es eso lo importante.

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