¡Por favor!

No te acerques tanto, ni te alejes demasiado.
Serena la humedad de tus labios y la maldad que se refleja en tus ojos.
Sólo deja que exista, pero no dañes por rutina.
Navega entre mis arterias y siente mis pálpitos.. siente mis penas.
Viaja hasta mi recuerdos, compra el boleto a mi felicidad y observa tu protagónico.
Comprende porqué te quiero de ésta manera, tan lejos que no puedas herirme, pero tan cerca que pueda seguir viendo tu rostro desde mi ventana.