Tu perdon merece.
No te pierdas la fuerza.
Eso no es por un día...
A qué conducirá todo esto.
De repente hay un sentido
Esa virtud que va al corazón y sin invitación.
Cuán pocos de los que te puedes callar.
Creemos en la vanidad eterna,
Dame una boda para que no me dejes sola.
Cuando el maligno le dijo.
No soy el primero en decir esto:
Mañana volverá a la vida.
Dejas tu olor en los jardines.
Por que ya te dije mi nombre ahora tu tienes que decirme tu nombre!
No me llamo Alberto.