SEGUNDO CONCURSO DE ESCRITURA Y PINTURA !! / SECOND WRITING AND PAINTING CONTEST !! / #WORLD OF XPILAR/ Chim crea el mundo

Cuenta una leyenda antigua que en el principio no existían los hombres todavía, ni animales, ni plantas, solo existían la tierra el mar y el cielo, de donde cayó Chim en el inicio.

Muchos milenios durmió Chim sobre la blanca arena, soñando en lo que habrían de crear sus manos. Cuando al fin despertó, quedó también, por muchos siglos, embelesado con el azul de cielo.

Un día se le esclareció un deseo. Movió una mano, lentamente. Delante de sus ojos surgieron las juguetonas nubes y Chim, que era un Dios niño todavía, rió con una risa cantarina.

Oyó su risa el dios y le pareció buena y entonces tuvo lástima del cielo, del mar, de la tierra; tan silenciosos todos.

En ese momento de bondad el dios creó las olas, con un rumor que recuerda el inicio del mundo. Pensó que las nubes podrían cantar también la canción de la tierra y creó el relámpago y el trueno.

Estuvo otros siglos escuchando las voces de la vida, con las que se estaba animando el universo.

Era Chin un Dios púber cuando comenzó su trabajo con la tierra. Le pereció muy plana e hizo cordilleras. Desde las nubes hizo caer las lluvias, que inundaron los valles; agujereó la tierra y se formaron las cuencas.

El agua dulce, bendita por la mano de Chim, porque era necesaria, hizo geminar las semillas, regadas en toda la superficie del planeta.

Chim usó su juventud para acomodar la tierra, para hacerla perfecta, porque sabía que, en sus sueños, los pájaros, los peces, los hombres y mujeres se atropellaban pidiéndoles vivir en sus espacios.

Y así pasó que, al final, apareció el hombre, con una condición esplendorosa: Pudo hablar con Chim de muchas formas, de corazón a corazón, de mente a mente, y supo aprender a pedir dones con plegarias. Y eran tan hermosos los hombres y mujeres y le hablaron con tonos y matices tan sutiles, que el dios les fue concediendo todo.

Chim ha vivido siempre en el corazón de los hombres de esta tierra. Los padres han contado a los hijos su historia. Por eso los niños dibujan cielos, mares, tierras... mares con barcos, cielos con nubes juguetonas, tierras con cuencas que reflejan el cielo, llenas de especies, de flores delicadas.

Es la manera que tienen los humanos de seguir recordando los sueños de Chim -mientras él se hace adulto- cuando durmió milenios en la blanca arena.