LAS MUJERES EN MI VIDA Y COMO ME INSPIRAN

A propósito de celebrarse este el día internacional de la mujer el 8 de marzo, y siguiendo la sugerencia de @beanz, quiero rendir tributo a las mujeres que muchas veces pasan desapercibidas, y reconocer el esfuerzo cuotidiano de estas luchadoras anónimas, tomando en cuenta el arrojo y dedicación que estas mujeres que pertenece a los estratos sociales más desposeídos, quienes asumen la vida de manera valiente ,y no pueden darse el lujo de abandonar, porque ellas son el mástil de esa embarcación llamada familia y están forjadas de la madera más fuerte que alguien puede imaginar.

Este es el hipotético itinerario de una mujer que vive en el barrio, es madre soltera de dos hijos, uno de siete años y otro de cinco, mujer luchadora de unos 27 años, con el nivel de educación media aprobado, con una carrea universitaria detenido por falta de tiempo.

Si preguntan ¿Dónde está el padre de los niños?, él está muy bien gracias, pego la carrera, cuando se enteró que esta chica había quedado embarazada hace un tiempo atrás, hasta el sol de hoy, brilla por su ausencia.

Mientras tanto lucha por de salir adelante, con dos niños, al principio habitaba en la casa de su madre, pero por vergüenza, cuando salió con la otra barriga, se mudó sola, faltándose muchos enceres, vivía en un cuarto que le alquilaba una comadre, quien además le cuidaba el niño mayor, cuando consiguió un trabajo, estuvo trabajando como pudo, hasta que faltaba poco para parir, tuvo mucha suerte porque en el trabajo la ayudaron con algunas cosas para el parto, aun trabaja allí y cuida su trabajo como un tesoro, tiene sus dos hijos los cuida su comadre, Hoy vive en una casa asignada a través de un programa gubernamental. Su día consiste en trabajar, esta entregada por completo a sus hijos, empeñada en darle una buena educación en valores, la noche anterior comienza su corre, corre, mientras revisa la tarea, va preparando todo lo necesario para el día siguiente. El desayuno, el almuerzo, el jugo para la lonchera, la ropa, los útiles en los morrales entre otras cosas.

Se levanta a las 4:00 am, comienza a preparar la cosas , con el susto de que no se le haga tarde, levanta al niño mayor , luego al pequeño los ayuda a vestir, mientras tanto corre, se arregla, se asoma por la ventana a eso de las 5:30am para asegurarse que este bajando la gente, porque si la calle está sola corre peligro de ser asaltada por el alto índice de inseguridad, antes de salir abriga bien a los niños, agarra las cosas emprendiendo la carrera para llegar a tiempo a la parada del bus, toma el trasporte público, llega a la escuela a eso de las 6:30am o a 20 minutos para las siete, deja a los niños. Rápidamente emprende el camino para llegar a tiempo al trabajo.

Al mediodía es una agonía está pendiente del teléfono rogándole a Dios que la comadre le avise si fue a recoger a los niños a la escuela, cuando llama y le avisa que ya los busco, respira hondo y sigue sus labores en el trabajo, si por el contrario le dice que no puede buscar a los niños entonces habla con el jefe, le pide un permiso para llevarlos a casa y devolverse rápidamente al trabajo.

Al final de la jornada, corre para que no la alcance la cola en la parada, debe llegar lo más pronto a su casa para atender a sus hijos, hacer la tarea, lavar un poco de ropa, hacer la comida para el día siguiente y si corre con suerte llegar a la cama a las 11:00pm Ya con la cabeza recostada a la almohada, sueña con sus días de estudiante, anhela terminar su carrera para ofrecerle a sus hijos mejores oportunidades, reflexiona sobre esos miedos que la embargan cuando piensa en enamorarse de un hombre que no quiera a sus hijos, por eso, se da animo diciéndose a sí misma es mejor está sola, sabiendo que es duro para ella luchar con todo lo que le dio la vida, que se le va a hacer, no hay vuelta atrás, mañana será otro nuevo día y es hora de dormir.

Estas mujeres son la fuente de mi inspiración, para ellas, mi humilde reconocimiento.