“Señoras y señores, interrumpimos nuestro programa de baile para comunicarles una noticia de último minuto procedente de la agencia Intercontinental Radio. El profesor Farrel del Observatorio de Mount Jennings de Chicago reporta que se ha observado en el planeta Marte algunas explosiones que se dirigen a la Tierra con enorme rapidez... Continuaremos informando”,así comenzaba Orson Wells la noche del 30 de octubre de 1938 un trabajo que consistía en adaptar para la radio obras literarias, le correspondía a la novela del escritor británico H.G. Wells, “La guerra de los mundos”. No obstante la Columbia Broadcasting System (C.B.S.) había presentado al inicio del programa tanto a Orson Welles como al Mercury Theatre en la adaptación de la citada novela, numerosos radioescuchas sintonizaron tarde la emisión o, simplemente, no procuraron la atención a una simple introducción de lo que parecía un programa cualquiera.

Luego del primer corte y para darle mayor autenticidad a la noticia, Welles retoma la supuesta emisión de una orquesta para volver a parar a medida que la ficticia invasión extraterrestre se iba desarrollando, “damas y caballeros, tengo que anunciarles una grave noticia. Por increíble que parezca, tanto las observaciones científicas como la más palpable realidad nos obligan a creer que los extraños seres que han aterrizado esta noche en una zona rural de Jersey son la vanguardia de un ejército invasor procedente del planeta Marte”, dijo Welles esa noche.

Los datos de audiencia consideran que aproximadamente 12 millones de personas escucharon la transmisión, otras cayeron victimas del pánico abandonando sus casas, colapsando carreteras, o puestos de policía. Los teléfonos de emergencia recibían multitud de mensajes que decían haber visto a los extraterrestres. El acaecimiento, que terminaba supuestamente con la “muerte» del propio Orson Welles a causa de los gases que emanaban los invasores”, pudo ser el fin de su brillante carrera, mas dada la cantidad de audiencia el revuelo que causó en la opinión pública, no fue más que el inicio

Orson había nacido en una familia adinerada en el año 1915, tenía 23 para el momento de la emisión en la radio, vivió la pérdida de sus padres a temprana edad, su madre, una pianista que falleció días antes de que él cumpliera nueve años y a su padre a los diez. Ingresó en un colegio especializado en jóvenes superdotados. Durante su adolescencia actuó en obras de teatro en Irlanda, estudio pintura y mantuvo un acercamiento constante con todas las artes.

Con apenas 26 años surge su opera prima en el cine “Ciudadano Kane” protagonizó, escribió, dirigió y produjo esta historia que habla de la ambición, corrupción y poder, pero también de soledad y traiciones, de sentimientos heridos. Ciudadano Kane ha estado liderando durante 50 años el top ten de la lista de las mejores películas de todos los tiempos de la prestigiosa revista Sight & Sound. El reputado crítico Roger Ebert decretó que Ciudadano Kane se trataba, oficialmente, del mejor filme de la historia.