Estaba revisando hoy mis fotos de la visita al vivero y noté que algunas fotos no las publiqué, es más ni siquiera consideré publicarlas. La verdad pensé que no eran tan coloridas como las flores y no llamarían la atención como estas. ¡Se las quiero mostrar!

Y de pronto caí en la cuenta de mi error, como sí las imágenes de estas plantas me hubieran hablando desde lo más profundo de su verdor: ¿Acaso la belleza tiene una sola forma o un solo color? o ¿ está ligada a un solo concepto?

Pero ellas, y algunas con un solo verdor; igual adornan el escenario. Matizan el mismo cuadro, complementan a las flores. Hacen un mismo concierto, solo que unas son soprano, otras mezzosoprano o contralto; cada una tiene tiene su propia historia y eso ya la hace valiosa.

No parece, pero algunas de estas plantas pueden llegar a ser más costosas que las mismas flores. Como por ejemplo las helechos, que no por eso son más valiosos; pero en la extraña quietud armónica, no exigen un lugar más alto, solo que se les mire y aprecie pues también están adornando el mundo.

Parecer ser que como la gran mayoría de lo que vemos es verde, nos acostumbrando a lo mismo, y deja de ser bello, pero si del polo norte, contemplaran esto que veo y no veo, me dirían que soy afortunado, viviendo con la belleza.

No te preocupes si a tu lado pasan otros que para nada te determinan, solo sigue hablando desde tu verdor, siendo tu mismo; contando una bella historia y tarde que temprano alguien hará una reflexión...Todos, absolutamente todos somos valiosos.

Con mucha cariño para tí y sigue siempre adelante.