Vitu, más rápido que la muerte III.
Estaba agotado y el sol aún tardaría en llegar a donde él se encontraba, ese era un buen momento para hacer un descanso y comerse algún cadáver putrefacto y chamuscado del día anterior.
Una vez se hubo alimentado, decidió explorar tranquilamente a su alrededor en vez de descansar, pero era complicado ver lo que había en la lejanía, todo el camino por el que siempre corría era una especie de cañón del que no se podía salir, de manera que sólo podía ver lo que se encontraba en el camino por el que pasaba una y otra vez.
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Debía hacer algo, debía cambiar sus hábitos para poder salir de esa situación, para salir de ese boquete en el que se veía atrapado, no podía ser que su vida no tuviera ningún sentido. Necesitaba creer en algo, creer que algo mejor de lo que él tenía era posible, quería ser un pájaro y poder volar a donde quisiera, quería dejar de escapar eternamente, vivir cómodo, explorar su planeta, reproducirse, transmitir sus genes, tener descendencia.
Después de permanecer un rato tumbado pensando en todo eso, se levantó y comenzó de nuevo a correr, el sol ya estaba cerca y su carrera por la vida estaba de nuevo en marcha. Se marchó contento, creía que había dado un gran paso ese día, otros ni siquiera se planteaban su existencia pero él iba más allá, él quería mejorar, quería una vida mejor, quería saber qué es lo que estaba allí pasando, quería terminar su carrera para siempre y vivir como le diera la gana vivir.
Vitu se marchó con una gran sonrisa, ahora tenía algo que antes no había tenido, un plan…
