Su ultimo mensaje de vida para mi - 16/03/2020

Han sido hasta ahora 4 días duros, entre un cansancio mental y físico. Somos seres que cuando estamos pasando por momentos muy fuertes, por pruebas muy difíciles de la vida nos cuesta a veces seguir y deseamos inclusive la muerte misma para acabar con nuestro infortunio. Pero cuando llega el momento real de ver o sentir como se extingue nuestras vidas es cuando nos damos cuenta que realmente no queremos despedirnos de esas personas que han estado toda una vida a nuestro lado.

Mi abuela era una persona de principios antiguos, y tenia tal vez una forma de ver la vida muy simple pero gratificante para ella ya que era devota a Dios y su religión como Testigo de Jehova. Creo que a pesar de sus errores y su imperfección supo como educar y formar mujeres especiales como lo son sus hijas, quienes siguieron también el mismo camino que ella.

Tal es el caso de mi madre quien toda su vida desde muy pequeña ha sido una niña y mujer luchadora y trabajadora y creo que es uno de los mejores regalos que me ha dejado mi abuela desde que tengo conciencia y existencia.

Si bien yo personalmente debo confesar que no era muy apegado a mi abuela dado que habían palabras y acciones que nos lastimaba mutuamente, había tal vez un poco de rechazo porque como mujer que ha vivido tantos años, ante sus ojos y ante los ojos de su creencia, mi condición sexual no era aceptada. Pero aun así estoy seguro que ella me quiso mucho, porque muchas veces lo demostró.Por eso es muy importante más la acción y reacción que las simples palabras.

Estos últimos meses, a pesar de que ya ella había tenido un tiempo viviendo en casa por su enfermedad, fue cuando más contacto y cercanía tuvimos, y en especial estos últimos 4 días fue cuando más conectado me sentí con ella, para ser especifico, sus últimos 40 minutos de vida.

Mi abuela ha pasado por muchas cosas en su vida, desde accidente de trafico (atropello), hasta diversidad enfermedades crónicas, como lo fue su problema pulmonar y de los riñones. Aun así y a pesar de su vejes fue muy valiente al soportar tanta calamidad con la convicción de querer seguir con vida y seguir sirviendo a Jehova, como de seguro, seguir viviendo los momentos con su familia.

El pasado 17 de Marzo, fue un día muy duro para todos, toda la familia nos reunimos en la casa de mi tía donde la estábamos cuidando y fue como si cada uno estuviera ya despidiéndose de ella. Ese momento donde empiezas a llamar a todo el mundo para que tenga la oportunidad de darle el ultimo adiós; es algo muy triste pero real.

A eso de las 5:30 pm entre a la habitación y encontré a mi madre de espaldas a mi abuela sirviendole de soporte mientras estaba ella sentada. Mi madre ha estado enferma desde hace 2 semanas por un resfriado que se le complico con asma, ella siempre ha sido una mujer también enferma y ya arrastraba un cansancio por cuidar durante muchos meses a una tía también enferma.

Así que de cierto modo me dispuse a ser mas útil de lo que no había sido tal vez antes, o seria que necesitaba y estaba destinado a hacerlo. Le pedí a mi madre suplirla para que descansara a través de una indirecta, así que yo tome la posición de espalda hacia mi abuela y empece a sentir lo poco cálido que quedaba de su cuerpo y su agitado respirar.

Entre los minutos me asuste por el ritmo en que respiraba, y sabia que iba a ser su ultimo día, todos lo sabiamos. Lo que no nos esperábamos es que tan solo le quedaban minutos. Estos días ella no había podido dormir seguramente porque se sentía asfixiada debido a su retención de liquido ya que no le funcionaba los riñones. Pero desde ese momento que ella nos pidió a través de señales que la sentáramos en la cama fue que empezó a sentir alivio y calmarse.

Desde ese momento en que sus hijas y nietos junto a ella la veían descansar, para mi estando tan cerca de ella, fue como si me hablara, como si me acaricia, fuese ella quien me diría adiós pero antes de ello, sentí como si me enseñara que no debiera temer a la muerte pero que mientras estuviese vivo, agradeciera y viviera a plenitud hasta los últimos días como ella lo hizo.

Su respirar agitado de pronto empezó a calmarse, como si ella estuviese teniendo un bonito sueño. Todos allí estábamos velando su ultimo sueño, hasta que simplemente, descanso por completo de una forma silenciosa.

Siempre he temido perder las cosas que amo, y hace mucho tiempo viví la experiencia de ver a un ser especial morir frente de mi de una forma desgarradora que ha dejado una marca en mi, así que de cierto modo, creo que hasta el final mi abuela y la vida misma fue muy buena con nosotros al irse de esa forma tan tranquila, en la cual no nos hizo sentir miedo, sino fuerzas para estar con ella hasta el ultimo segundo.

Quería llorar, era el único que tenia seguro que ya había muerto, pero debía ser muy fuerte para mi madre, así me dispuse a hacerlo y así mismo lo hice, porque mi abuela antes de partir quería que mi madre fuese fuerte ya que para ella en sus últimos momentos fue especial, no dejaba de decir su nombre, así que estaba agradecida de tener a parte de sus hijas y en especial a ella durante todo este largo camino.

A pesar de la realidad de la vida hoy día, de las restricciones por el coronavirus , pudimos velarla como una pequeña familia y el día de ayer la enterramos. Personalmente estoy agradecido por todas esas personas que se han tomado un tiempo para dar bonitas palabras por las diferentes redes.

Descansa en paz abuela y madre

Felida Gil, te amamos y siempre te vamos ha amar.