Este día mi trabajo me ha traído olor a mar y un fuerte sol, el Catire está arrecho es uno de los dichos populares que en Venezuela utilizamos para referirnos a que el día está despejado (poca presencia de nubes en el cielo) y los rayos del sol penetran fuertemente en la tierra. Vargas es uno de los Estados donde el Catire se arrecha con mucha frecuencia, pues se trata de una región costera donde los caraqueños vienen a la playa.

Este Estado lleva su nombre en honor al Dr. José María Vargas quien se encargó de retirar y preparar personalmente los restos del Libertador Simón Bolívar para su traslado desde Santa Marta, Colombia a Caracas, Venezuela. Dicho con mis propias palabras, Vargas es un Estado estrecho pues básicamente está compuesto de un pequeño pedazo de costa al Norte, que apenas es permitido por las enormes montañas del sur, buena parte de estas montañas pertenecen al Waraira Repano, la enorme serranía que es conocida como Cerro El Ávila.

Ciertamente no todas estas montañas se encuentran dentro del Parque Nacional Waraira Repano, en algunas de estas montañas se han realizado construcciones sobre su superficie y en ellas habita buena parte de la población del Estado Vargas, sobre todo la más humilde como se puede apreciar en esta foto que tomé desde uno de los barrios de La Guaira, Capital del Estado Vargas.

Algunas edificaciones habitacionales más modernas se han construido en las pocas partes planas de este Estado, sobre todo donde las montañas dejan más espacio, como es el caso de la Población de Tanaguarenas; pero en la mayor parte del suelo plano de poblaciones como La Guaira, Macuto y Naiguatá se han levantado Hoteles, El Puerto, Centros Comerciales, Supermercados y Edificios de Gobierno.

En la mañana, entre las 8:00 y 8:30 a.m., pasamos por este pequeño y apacible barrio, los padres de uno de mis compañeros de trabajo viven aquí; él nos pidió el favor de pasar por este lugar antes de dirigirnos a nuestro punto de trabajo, para llevarle algunos alimentos básicos a su familia como harina de maíz, leche y pasta. Mientras estábamos estacionados no desaproveché la oportunidad de tomar una foto desde esta vista única que seguramente han visto unos pocos turistas.