Un día mis amigos decidieron invitarme a salir. Me fuí escapado de mi mujer porqué no le gustaba esos amigos míos. Entre tragos y bebidas miré el reloj y dije: -¡Dios son las 5 de la mañana! ¡Va a matarme mi mujer!. Cuando les dije a mis amigos que me iba me agarraron y me dijeron: -Espera un poquito más. Amanecí, pensando después de un gusto,un susto. Entré sin hacer ruido a la casa y mi esposa me guindo en el armario como el maniquí de su hermana. Estaba tan borracho que me quedé dormido. Luego desperté y me dí cuenta que había sido una pesadilla.- ¡Menos mal!Me dije sino estuviese votado con esta situación que me haría.