Para ti que estás tan lejos de casa.

Aunque estás a miles de kilómetros sé que me tienes tan presente como yo a ti; quiero contarte que desde que te fuiste no ha pasado un día sin que estés en mi mente, estoy tan alegre por lo bien que te va, se nota en tus fotos, las cientos de fotos que tomas porque donde estás puedes sacar tu celular y tu cámara sin ninguna preocupación. Te ves tan feliz en todos esos lugares que frecuentas: restaurantes, bares, discotecas, museos, teatros… He notado que has hecho tantas cosas que aquí jamás pudiste hacer, ¿qué tal estuvo el concierto de ese cantante al que tanto amas?, recuerdo que siempre habías soñado con verlo en vivo pero nunca vino a Venezuela.

Te extraño, quisiera que estuvieras aquí, pero inmediatamente recuerdo que todo está mejor allá, prefiero tenerte lejos y no perderte para siempre, como pensé que pasaría cuando fuiste víctima de la inseguridad que nos azota, al fin y al cabo no hay distancia que separe a dos personas que están unidas por tantos recuerdos. Me conformo con llamarte por Skype si tengo ganas de verte, y con enviarte un mensaje, una nota de voz o llamarte si quiero sentirte cerca, todo lo que importa es que ahora estás bien.

Sé que has tenido días malos, que no todo ha sido color de rosa pero ¿sabes?, la tranquilidad no tiene precio, recuérdalo siempre y jamás te arrepientas de tu decisión, quizás has llorado un par de noches por estar tan lejos de casa, quizás te has sentido mal y nadie te ha llevado una taza de té ni te ha dado un abrazo, yo también extraño tus abrazos, yo también he llorado un par de noches, pero más hubiese llorado si te hubiese perdido aquel día, tuve la suerte de llorarte en un aeropuerto. A ti no te reprocho nada, por favor no te preocupes por mí, tu felicidad es mi felicidad.

Te amo, espero que la vida nos reencuentre pronto...