Caña de azucar
Actualmente, se cultiva extensamente en regiones tropicales y subtropicales por todo el mundo.
La Caña de Azúcar se reproduce a través de trozos de tallo. Lo más recomendable es que la siembra se realice de Este a Oeste, de forma que se logre la mayor captación de luz solar. Los tallos que se utilicen deben tener entre 6 a 9 meses de edad, provenir de cultivos sanos y cuidados; así como usar preferiblemente la parte media del tallo (esquejes con 3 yemas).
La siembra se realiza en primavera y otoño, alrededor de 6 000 a 7 000 kg/ha. Su crecimiento es rápido al comienzo del verano, aumentando la producción de azúcar en otoño. La planta madura por 12 ó 14 meses.
Los principales factores del clima que controlan el desarrollo de la Caña de Azúcar son:
Temperatura
Humedad
Luminosidad
Debido a que la caña es una planta tropical, su desarrollo es mejor en lugares calientes y soleados. Al haber temperaturas muy altas, la planta alcanza un mayor crecimiento vegetativo y bajo estas condiciones la fotosíntesis se desplaza, hacia la producción de carbohidratos de alto peso molecular, como la celulosa y otras materias que constituyen el follaje y el soporte fibroso del tallo.
Una ventaja que tiene ésta planta, es que puede soportar heladas, pues los nódulos son susceptibles a proporcionar un nuevo crecimiento dependiendo de la gravedad de la helada.
La Caña de Azúcar se puede cultivar en la mayoría de suelos; aunque es muy importante que estos cuenten con materia orgánica y presentar buen drenaje tanto externo como interno. El pH ideal oscila entre los 5.5 y 7.8 para su óptimo desarrollo. Se reportan buenos resultados de rendimiento y de azúcar en suelo de textura franco limoso y franco arenoso
El cuidado de terreno debe ser riguroso pues la cosecha puede ocupar al mismo hasta 4 años. El arado tiene que ser profundo para luego comenzar con la siembra de semillas.
Es necesario proporcionar una adecuada cantidad de agua a la caña durante su desarrollo, con el fin de permitir la absorción, transporte y asimilación de los nutrientes. Sin embargo, la planta es muy resistente a la sequía, por lo que su producción baja en ese período.