The land for planting || El terreno para la siembra
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Reading about country people who in spring prepare the field for planting I remember what the word says about it.
The sower went out to sow his seed; and as he sowed, some fell by the wayside, and was trodden down, and the birds of the air ate it up. 6 Another part fell on the stone; and born, it withered, because it had no moisture. 7 Another part fell among thorns, and the thorns that grew up with it choked it. 8 And another part fell on good ground, and grew and bore fruit a hundredfold. Speaking these things, she said with a loud voice: He who has ears to hear, let him hear
Luke 8:5-8
Knowing some cases in which the land is prepared and it is very dry and with many rocks, in these cases it is practically almost impossible for a plant to survive, only weeds have a chance, in these cases it is necessary to work the land with fertilizer and mix with soil for this to work, This usually happens in many cases and a lot of work is required to obtain the expected fruit.
In the previous picture Jesus explains to the disciples that after all NOT everyone would accept his teachings and like the earth that is taken as an analogy of the human heart. There are hearts that are not yet in condition, work is needed to be able to sow. While in other hearts the word grows and bears fruit immediately, that is why the land is compared to our hearts, it is not always 100% suitable, but with work and perseverance the objective can be achieved and the word bears fruit. .
Each one of us does NOT have the ability to foresee and know in advance who has a fertile heart, there are many situations that can prepare the heart, especially reading the word of God that has the power to transform. You and I are the instruments to prepare the land, we use spiritual resources such as: the word of God, prayer, etc. The accompaniment of those who need to transform their lives.
Let us prepare the land whose seed will grow and bear fruit a hundredfold.
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Leyendo acerca de las personas de campo que en primavera preparan el campo para la siembra recuerdo lo que dice la palabra acerca de ello.
El sembrador salió a sembrar su semilla; y mientras sembraba, una parte cayó junto al camino, y fue hollada, y las aves del cielo la comieron. 6 Otra parte cayó sobre la piedra; y nacida, se secó, porque no tenía humedad. 7 Otra parte cayó entre espinos, y los espinos que nacieron juntamente con ella, la ahogaron. 8 Y otra parte cayó en buena tierra, y nació y llevó fruto a ciento por uno. Hablando estas cosas, decía a gran voz: El que tiene oídos para oír, oiga
Lucas 8:5-8
Conociendo algunos casos en que se prepara la tierra y esta es muy seca y con muchas rocas, en estos caso prácticamente es casi imposible que una planta sobreviva, solo las malezas tienen alguna oportunidad, en estos casos se necesita trabajar la tierra con abono y mezclar con tierra para que esto funcione, Esto suele suceder en muchos casos y se requiere mucho trabajo para obtener el fruto esperado.
En el cuadro anterior Jesús explica a los discípulos que después de todo NO todo el mundo aceptaría sus enseñanzas y así como la tierra que es tomada como analogía del corazón del hombre. Hay corazones que que aún no están en condiciones, se necesita trabajo para poder sembrar. Mientras que en otros corazones la palabra crece y lleva fruto de manera inmediata, por ello es que el terreno se compara a nuestros corazones, no siempre es 100% apto, pero con trabajo y constancia se puede lograr el objetivo y que la palabra lleve frutos.
Cada uno de nosotros NO tiene la capacidad de prever y conocer de antemano quienes poseen un corazón fértil, muchas son las situaciones que pueden preparar el corazón, sobretodo la lectura de la palabra de Dios que tiene el poder de transformar. Tu y yo somos los instrumentos para preparar la tierra, utilizamos los recursos espirituales como: la palabra de Dios, la oración, etc. El acompañamiento de aquellos quienes necesitan transformar sus vidas.
Preparemos la tierra cuya semilla crecerá y llevará frutos al ciento por uno.
Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.
