¿Hacia un mundo sin billetes?

Las capacidades de las tecnologías Blockchain ha impulsado a los bancos centrales a crear sus monedas virtuales y con ello, modelos financieros ajustables a los esquemas de medio y largo plazo. La relación entre negocios, consumidor y gobierno debe evolucionar, las empresas buscan hacerse un lugar en este revolucionario mercado de criptrodivisas. Las ventajas que están ofrecen son estimulantes tanto para las primeras potencias como los que están en vías de desarrollo. El futuro nos alcanza?

Veamos...
Se calcula que hay 135 monedas distintas emitidas por bancos centrales de 167 países.

Se podría decir que hay aproximadamente en todas las monedas del mundo un valor equivalente a 55 billones de dólares, de los cuales solamente unos 5,2 billones son en dinero físico en circulación (billetes y monedas emitidas por los bancos centrales de los países) el resto existe virtualmente en cuentas bancarias, en las bases de datos de los distintos bancos.
En el mundo 85% del total de las transacciones todavía se realizan en efectivo (Mastercard Advisors, 2013a)

¿Cómo puede hablarse entonces de el fin del dinero en efectivo?
*Con el Blockchain se pueden quitar de lado ciertas condiciones del efectivo como son:
*Se usa exclusivamente en el mundo digital en contraposición al carácter universal de los billetes.
*Se puede saber con exactitud quien es el dueño de los Bitcoin, con los billetes hay anonimato.
*Se puede estipular intereses frente al valor nominal de fijo de los billetes.
*Menores costos de transacción al no haber intermediarios, equipos y resguardo.
*La cadena de bloques otorga autenticidad, el token por si solo tiene valor;
*No hay que fabricar papel moneda con incrustaciones de seguridad.

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Lo que se busca son políticas fiscales basadas en el uso de las capacidades del Blockchain; mayor transparencia para prevenir actividades delictivas, falsificación y crimen organizado, sustituir de forma parcial el uso de efectivo (o al menos disminuir su uso) por sus costes de informalidad y ocultación fiscal entre otras. Las propuestas de los bancos centrales interesados en la innovación de la divisas se moldean en función con estos objetivos. Se están tomando estos criterios; para pagos interbancarios - como sustituto del efectivo - como herramienta de política monetaria y como alternativa a los depósitos bancarios. Aspectos transversales que definen como serán los nuevos procesos de negocios en el mercado financiero mundial. Como quiera que sea, nadie puede con el fenómeno, y la implosión de las criptomonedas puede incrementar la estabilidad financiera reduciendo la probabilidad de crisis bancaria en un mundo dominado muchas veces por malas políticas económicas y “fallos estructuralistas” derivados del modelo fiduciario. Muchos mecanismos no están claros, lo que si es seguro es la naturaleza disruptiva de los esquemas ante los nuevos desafíos que imponen los balances ya evaluados. El panorama es muy alentador como ha sucedido en otros sectores que se han transformado por las nuevas tecnologías y la digitalización.

Es el fin del efectivo como lo conocemos???
Por ejemplo
Dinamarca ha avanzado tanto en su determinación hacia las finanzas digitales que anuncio que para las tiendas de ropa, gasolineras y restaurantes ya no aceptaran mas pagos en efectivo. Su Banco Central ya no produce monedas y billetes. Pagar en efectivo apenas llega al 25% de las operaciones según el CONSEJO de PAGOS de ese país. Y en Suecia cada día hay menos cajero tradicionales en su intención suprimir el dinero físico y que pronto será la primera sociedad virtualmente sin efectivo.

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He aquí un extracto de un estudio realizado por el Instituto Mexicano para La Competitividad y la USAID de EEUU denominado “REDUCCIÓN DE USO DE EFECTIVO E INCLUSIÓN FINANCIERA”

"El efectivo es costoso para el gobierno por el número de transacciones en efectivo que quedan sin registrar y no pagan impuestos. Las transacciones no recaudables le cuestan al gobierno estadounidense 100 mil millones de dólares anuales aproximadamente (Chakravorti y Mazzota, 2013). Rogoff (2014) estima que generalmente el 50% del dinero circulante en la mayoría de los países es usado para esconder transacciones –usualmente actividades ilícitas o informales. Los países con niveles altos de uso de efectivo generalmente tienen también mercados informales grandes y niveles de percepción de corrupción más elevados."

Como se puede observar las consecuencias que implica el efectivo para las economías están siendo severamente cuestionadas por ellas mismas y para que disminuya el uso de efectivo hay que impulsar elementos clave como la confianza en los sistemas de pagos alternativos, protección al consumidor, simplicidad, seguridad, bajo costo de acceso y uso de las plataformas.

Referencias:
http://www.abc.es/economia/abci-hacia-mundo-sin-efectivo-201611130245_noticia.html

https://www.youbioit.com/es/article/shared-information/19294/cuanto-dinero-hay-en-el-mundo

https://www.ecb.europa.eu/euro/banknotes/circulation/html/index.es.html

http://imco.org.mx/wp-content/uploads/2016/01/2016-Reduccion_uso_efectivo-Documento_completo.pdf