Reflexión Biblica Lucas 12, 22-32
Hijita mía, no te preocupes por lo que has de comer para vivir, ni por la ropa que necesitas para cubrir tu cuerpo.
La vida vale más que la comida y el cuerpo vale más que la ropa.
No tengas miedo pequeña, el padre en su bondad ha decidido regalarte el reino.