¿Cómo jugar al ‘spinner’ que oculta Google?

 Los spinners causan furor y ya son el juego del verano y, probablemente, del otoño que está por llegar. La moda de este artículo que aparentemente no tiene mucho misterio parece haber escalado hasta las más altas esferas, e incluso Google se ha hecho eco de los spinners incluyéndolos en su carta de funciones especiales, una herramienta que mantiene más o menos oculta pero que hace las delicias de los usuarios.

Google rinde homenaje así a la fiebre de los spinners

¿Cómo jugar con el spinner de Google? Este juguete antiestrés está, de momento, solo disponible en inglés, aunque no se necesiten idiomas para interactuar con él.Para poder utilizarlo simplemente habrá que cambiar el idioma de preferencia en la página de inicio del motor de búsqueda. Una vez hecho esto, basta con escribir “spinner” en la caja del buscador para que aparezca el doodle y se pueda empezar a jugar con él.Este juguete, que podría definirse como la peonza de los millennials, comparte con esta última su principal característica: que da vueltas. El usuario de un spinner físico debe impulsar con mayor o menor fuerza el spinner para conseguir regular la velocidad.Además, una vez en movimiento, se pueden hacer todo tipo de filigranas con él: apoyarlo sobre un solo dedo, hacerlo girar, lanzarlo al aire, etc. El de Google no permite tanta interacción, pero al menos si que se encarga de saciar el mono de aquellos que no puedan desestresarse de otra manera porque, por ejemplo, estén en su puesto de trabajo.El spinner no es el único juego que Google puede proporcionar a los usuarios. Tan sólo hay que saber buscarlos correctamente. Por ejemplo el famoso comecocos o Pac-Man también está disponible y para acceder a él tan sólo hay que escribir en el buscador el nombre del juego.En este caso el juego era un inocente doodle de aniversario que se publicó en 2010. Cuando dejó de estar disponible los usuarios mostraron su interés por seguir usando la aplicación, por lo que Google decidió dejarla disponible, pero escondida, para que pudieran disfrutarla aquellos que quisieran.