Saludos cordiales. Hoy quiero mostrarte las 3R, una filosofía de gestión de residuos, que si no has escuchado te invito a leer. Es muy interesante y además muy útil para nuestra cotidianidad y planeta. Las 3R: Reducir, Reutilizar y Reciclar.

La Primera R – Reducir

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Cuántas veces tenemos cosas y queremos nuevas. Lo más triste es que esas cosas que compramos luego serán sustituidas por otras y luego por otras y aunque nos satisfacen por un período de tiempo breve, se acumulan generándonos un dolor de cabeza, ya que luego no sabemos qué hacer con ellas, y a la final pararán en la basura. ¡Así es! compramos y compramos y lo que hacemos es incrementar la cantidad de basura que llegará al vertedero o relleno sanitario y con esto crecerá la emisión del CO2 que daña nuestra capa de ozono. Ahorita nos suena trillado pero tal vez esperar que ya no podamos respirar, será muy tarde. Yo no me canso de hacer eco de esta información, siempre habrá alguien ambientalmente responsable que diga ¡si vale la pena!.

Es por lo anterior que nació la “R” de REDUCIR, para minimizar la compra de nuevas adquisiciones y en caso que sea necesario, priorizar a elementos con varios usos. Por ejemplo si vas a hacer una reunión familiar, es mejor prescindir de los vasos y platos desechables, que se usan una sola vez y utilizar los vasos de vidrio que tienes en tu casa. ¿Has pensado cuánto tarda en degradarse el plástico y tu utilizas los desechables SIN NINGÚN REMORDIMIENTO? No solo ahorrarás dinero sino que el planeta y las futuras generaciones te lo agradecerán. Es cuestión de ir formando el hábito, de seguro lavarás más platos y vasos, ¡si es verdad!, pero si muchas personas conscientes hacen lo mismo que tú, son cantidades y cantidades de toneladas de basura que se reducirán diariamente y valdrá la pena.

La Segunda R – Reutilizar

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Esta R me encanta, porque entonces debemos pensar 2 y hasta 3 veces si botamos algo antes de decidir hacerlo. La cuestión es utilizar las cosas hasta que ya no se pueda más y a veces hasta se pueden reparar y serles útil a alguien. ¿Por qué desecharlas de buenas a primeras si quizás haya alguien que las necesite?. Es cuestión de revisar nuestras cosas y si ya no se adaptan a mis nuevas necesidades, donarlas o venderlas. Si te contagias con esta R, a la hora de comprar algo, lo pensarás más de una vez si lo adquieres o no. Debe ser algo que te haga falta y perdure en el tiempo para que realmente valga la pena para el planeta.

Quizás alguien dirá pero para que hacer esto, me compro lo que quiero y lo boto cuando lo deseo… y yo le respondo. Es cuestión de consciencia, de no pensar solo en mí, es pensar que quizás mis hijos o mis nietos ya no tengan la oportunidad de tener agua limpia o de respirar la cantidad necesaria de oxigeno. Es pensar que el fenómeno del cambio climático derretirá los glaciares y habrán inundaciones y un sin número de desastres naturales que dejarán sin vida miles de especies, inclusive la humana.

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Otro ejemplo claro de reutilizar es cuando usamos el papel por ambas caras, y posteriormente se puede convertir en pulpa y generar más papel… has pensado ¿cuántos árboles se talaron para poder obtener una resma de papel?. Es fácil talar un árbol, ¿pero cuántos se siembran para restituirlos?. Ellos absorben el CO2 que es tan dañino al ambiente y nos aportan oxigeno; es decir son vitales para nuestra supervivencia.

Espero te haya gustado la información, salió de mi inspiración. En el siguiente post seguiremos con la segunda parte y trataremos sobre la tercera R , ¡no te la puedes perder!. ¡Que tengas un bonito día!.

Para ustedes, Alexandra Torres, una Ingeniero Civil con consciencia ambientalista. En steemit @xandra79. Espero tus comentarios.