Qué te pueden enseñar el anime y el k-pop sobre la globalización

"La globalización" es un concepto cuya popularidad explotó luego del final de la Guerra Fría, y que, actualmente, cualquier persona que no haya estado en coma durante los últimos 20 años seguro habrá escuchado un par de veces. Esto también ha hecho que alrededor de éste se hayan creado gran desinformación, en parte motivada por políticos conservadores, quienes temen que esa palabra que han escuchado durante años se esté volviendo realidad. De esta manera, han llegado a Europa y, más conocido, a Estados Unidos, políticos con propuestas proteccionistas que van en contra de la mencionada globalización. Pero este es un proceso que llegó a un punto de no retorno, y mis ejemplos favoritos se encuentran en Asia.

Fuente 1, Fuente 2

El efecto que han tenido el anime y el k-pop sobre occidente en las últimas dos décadas es imposible de negar. Ambas industrias han experimentado gran éxito comercial a este lado del mundo, y su popularidad ha crecido exponencialmente en el público occidental. Para verlo con mayor claridad, sólo hace falta ver los resultados de los Billboard Music Awards 2017, en los que el grupo BTS ganó el premio Top Social Artist, categoría en la que estaban nominados junto a Justin Bieber y Ariana Grande, entre otros. Por el lado de la animación japonesa, con simplemente buscar en Google imágenes "Anime Expo" la cual toma lugar en Los Ángeles y es, probablemente, la convención más grande de anime en occidente, atrayendo a más de 100.000 fanáticos del anime el 2017.

"Te estás desviando un poco del tema. Por favor dinos de una vez por todas qué es lo que podemos aprender de esto..."

Tienes razón voz cursiva, lo siento, cuando comienzo a hablar de formas de entretenimiento asiáticas a veces me distraigo. ¿Qué nos pueden enseñar sobre globalización? Principalmente, a través de ellos podemos aprender dos cosas que son básicas a la hora de entender la globalización:

1. Cualquier cultura puede volverse popular y conquistar el mundo.
2. Es un proceso inevitable.

Vayamos en orden y comencemos por el primer punto. Mucha gente parece entender mal el concepto de "globalización", y piensan que ésta implica un "lavado cultural" por parte de países pequeños con culturas muy distintas, y una "invasión cultural" por parte de la cultura occidental/americana. Esto es en su mayor parte falso. Luego de la Segunda Guerra Mundial gran parte de Europa y Asia quedó devastada y tuvieron que depender en gran parte de ayuda americana, y debido a esto la cultura americana logró esparcirse con mayor facilidad alrededor del mundo. Países como Japón y Corea tuvieron que adoptar parte de la cultura americana para dejar atrás la crisis económica que había dejado la guerra. Sin embargo, eso no significa un "lavado cultural" ya que esa apropiación de la cultura occidental por parte de países orientales no conllevó pérdida de tradiciones. De hecho, con la llegada de extranjeros a estos países, muchas tradiciones se exaltaron y tomaron un aspecto exótico. Así, por ejemplo, los templos de Japón (y todo lo que rodea al sintoísmo) llegaron a ser grandes atractivos turísticos.

¿Cómo nos lleva esto al k-pop y el anime? Hasta ahora hemos visto cómo ha cambiado la sociedad asiática debido a la cultura occidental, y cómo se ha exaltado la cultura dentro de Asia. El k-pop y el anime van un poco más allá y llevan esa cultura fuera de Asia, atrayendo fanáticos de todo el planeta y cambiando la cultura popular de occidente. El cine siempre se ha caracterizado por ser el arte de las adaptaciones, y en los últimos años hemos visto más y más cómo Hollywood ha volteado a ver historias provenientes de Japón como fuente de inspiración para adaptaciones cinematográficas (por ahora muy malas desafortunadamente). Por el otro lado, aunque el k-pop ha tenido claras influencias de la música occidental (que transformaron lo que un día fuera el Trot en lo que ahora conocemos como k-pop) cuando vemos Gangnam Style hay algo claramente distinto a la música pop occidental... está en coreano, entre otras cosas. El simple hecho de que haya logrado ser popular en todo el planeta estando en un idioma tan desconocido en un mérito que no se puede negar. Y no sólo "logró ser popular a pesar de el idioma", si le preguntas a un fanático de k-pop, la mayoría coincidimos en que el idioma en uno de los principales atractivos de dicha música.

Pasemos al segundo punto y quizá el más importante para el futuro: la globalización es completamente inevitable. Lo ha sido desde que se inventó el internet. Antes de la existencia del internet, el tipo de entretenimiento que consumíamos no dependía de nosotros. Si querías escuchar música, dependía de qué canciones había en la tienda; si querías ver una película, dependía de qué había en alquiler; si querías ver un dibujo animado, dependía de qué pasaban en la televisión. Y eso implicaba la imposibilidad de consumir entretenimiento del otro lado del mundo. Internet, por otra parte, destruye por completo esa barrera. Hay un sólo internet, y es el que utilizamos todos. En ese único internet está todo lo que necesitas buscar. No importa si las compañías distribuidoras no quisieron traer Kimi no Na wa a Venezuela, ahí está internet, puedes ver Kimi no Na wa cuando quieras. Además, no importa de dónde sea una página de internet, puedes ingresar a ella. ¿Quieres entrar a una página de Rusia que sólo utilizan los residente del país? no importa si vives en Argentina, podrás hacerlo. ¿Que quieres ver a coreanos jugando Minecraft? Puedes hacerlo

Y esto es algo que te afecta a ti directamente. Imaginemos que eres un diseñador gráfico que está viviendo en España, y una empresa está buscando diseñadores para armar su página web. Dicha empresa está recibiendo portfolios, y como le llegará el tuyo también le llegará el portfolio de un artista venezolano que quizá hace trabajos de ligera menor calidad, pero cobra 5 veces menos que los trabajadores españoles. El internet permite que esta situación sea posible, y crea un mercado laboral más competitivo, lo cual a gran escala es increíblemente beneficioso para la economía global, y va a hacer del mundo un lugar mejor, quizá a ti no te venga tan bien. Así que en vez de negar la existencia de la globalización, o intentar evitar que ocurra, deberíamos estar concentrados en prepararnos e intentar formarnos, porque, literalmente, es todo lo que podemos hacer si queremos sobrevivir y ser exitosos en un futuro donde las fronteras sean irrelevantes.