A modo personal, creo que la intención del autor era provocar las reacciones que se suscitaron; ciertamente es una crítica al machismo, pero también es una crítica muy sutil a la sociedad mexicana en general respecto a las prioridades actuales. Para muestra de un botón lo que pasó en Culiacán, las protestas de mujeres y la preocupante nula importancia que el dúo sociedad / gobierno le ha dado por encontrar soluciones eficaces para combatir el problema de raíz.