Desarrollo sostenible vs. Desarrollo productivo
La extracción desmedida de materias primas a nuestra madre naturaleza recorta el tiempo de vida útil que nuestro planeta nos pueda sustentar, por lo que estamos hablando de una ”amenaza a último plazo” de nuestra especie. Es por eso que necesitamos un cambio en el modelo de producción, factor de incidencia directa con respecto al modo de explotación de los recursos naturales, que condicione el proceso de fabricación en un volumen de producción real con respecto al número de consumidores, evitando así el excedente de manufactura del que gran parte va a convertirse en basura, creando otro problema de contaminación ambiental.
Considerando que los teléfonos celulares (TC) son productos manufacturados de alta demanda en el mercado, los tomaré para exponer el ejemplo hipotético acerca del momento en que se recogieran todos los TC de los anaqueles y depósitos de mundo, y luego se repartieran uno a cada persona: sucedería que hasta los niños marginales de Somalia tendrían cada uno un TC. Aun así se siguen fabricando miles de TC al día para satisfacer una demanda de mercado, con el conocimiento que gran parte de las unidades de éste y el resto de los productos de comercialización masiva nunca se venderán.
El problema tiene su punto de partida en que varios fabricantes compiten por posicionar sus productos en común en el mercado, y en sus análisis de probabilidades de ventas siempre estiman el panorama optimista a la hora de fijar el número de unidades a fabricar, para no dejar de vender debido a una baja oferta, además que en la medida en que más unidades se fabriquen más se abaratan sus costos de producción por producto elaborado; de manera que las grandes manufactureras prefieren que se pierda un porcentaje de la producción que correr el riesgo de no cubrir la demanda. Este modo de producción atiende al modelo de ”Desarrollo Productivo” que en la actual economía globalizada implementan los países industrializados, quienes adquieren del resto de los países exportadores de materia prima más de la necesaria que necesitan para cubrir la demanda real por consumidor.
Cambiar a un desarrollo sostenible
Lo cierto del caso es que cada artículo que se fabrica requiere de materia prima que se extrae de la naturaleza, y resulta alarmante al darnos cuenta de todo lo que desperdiciamos cuando restamos las unidades que se pudieron vender (sacarle provecho) al número de unidades fabricadas. Sabemos que el crecimiento de la población en el mundo, sobre todo en las grandes urbes donde se acrecienta el consumo de bienes manufacturados, tiene tendencia al aumento de la demanda; pero nos sorprendería saber, después de elaborar estudios estadísticos certeros de lo que realmente necesita el consumidor para satisfacer sus necesidades, bajando más bien el volumen de producción si las industrias solo fabricaran en función de cubrir la demanda real.
El modelo de Desarrollo Sostenible se presenta como una alternativa ecologista de producción, utilizando los recursos tecnológicos en todas la áreas posibles que permitan satisfacer la demanda real de productos manufacturados, creando el menor impacto posible en el medio ambiente. Algunas de las aplicaciones tecnológicas en que se apoya el desarrollo sostenible son:
- Estadísticas.- Hoy en día con el desarrollo del análisis estadístico y los medios informáticos estamos en facultad de poder establecer criterios más personalizados de los consumidores que ayuden a restringir los excedentes de producción, más cercanos a la demanda real.
- Reciclaje.- Otro recurso emblemático del desarrollo sostenible es el ”reciclamiento” de productos elaborados que han quedado en desuso y que han pasado a engrosar los vertederos de basura. En la medida en se diseñen sistemas más sofisticados en el reciclamiento de desechos para la fabricación de otros productos de consumo final, insumos o materias primas elaboradas, menos recursos naturales habrían que extraerse de la tierra y evitar su excesiva expoliación.
- Economía circular.- Forma parte de las políticas del desarrollo sostenible en darle posibilidades de reciclaje a los productos o insumos proclives a ser desechados, cambiando su diseño o materiales de fabricación con la intención de evitar que se convierta en basura o que, al menos, ésta se haga biodegradable para evitar la contaminación ambiental.
- Evitar la obsolescencia tecnológica.- Con el fin de mantener activa la cadena de consumo, gran parte de los productos manufacturados se fabrican con cortos tiempos de vida útil para su rápido desecho y reemplazo, aun cuando se pueden mejorar en calidad para su mayor durabilidad o que en sus diseños se cambie el uso de insumos consumibles por retornables.
Debemos darle la importancia que amerita el reto que tenemos los seres humanos de dejarle un mundo sostenible a las nuevas generaciones, que garantice nuestra continuidad como especie, y eso solo es posible con cambios radicales en el modo en que hemos tratado al planeta; debemos evolucionar en pensamiento y comportamiento en esta nueva era del nuevo milenio: era en que los seres humanos decidiremos si continuar viviendo o extinguirnos.
Mientras exista el consumismo va a ser un poco difícil cambiar el chip a toda la humanidad, sin embargo ya hay ciudades declaradas sostenibles y son un ejemplo a seguir.
Hola Jose,
Excelente post. Aunque difiero en lo que mencionas como sugerencia de que las empresas produzcan solo la demanda que se les solicita. Esta difícil, ya que las empresas buscan minimizar costos SIEMPRE. Si comparto el hecho del reciclaje y ante todo la responsabilidad social y con el medio ambiente.
Muchas empresas que explotan nuestros recursos naturales, no tiene un proyecto sostenible lo cual perjudica toda una sociedad.
Es hora de tomar conciencia.
Un gran saludo!