Si miras al cielo, cada una de las nubes representa un amigo, puede ser cirros, cirrocúmulos, altoestratos, altocúmulos, estratos, estratocúmulos, y pare de contar, cada uno sin igual, pero todos en el firmamento haciendo la diversidad, la verdad es que los amigos son ese espacio de afecto con el que podemos contar.

Seguramente el cielo llora, quizá la lluvia azota. La verdad es que están en juego los sentimientos humanos de solidaridad y afecto, no está bien, no es normal fallarles a los amigos de verdad, pero quizá el que te acompaña en la penas es tan amigo, como aquel que te da espacio para que puedas pensar.

Lo más importante es decirle amigo a quien conocemos, quien se identifica con nosotros en algunos aspectos que nos puede interesar, cuando este vínculo se mantiene al pasar del tiempo, estamos frente a un tesoro de la humanidad, lazos eternos que van más allá de la consanguineidad. Es vital entre los amigos saber escuchar, una comunicación que respete los límites de la verdad, un amigo es un ángel, decía mi mamá, un ángel que te acompaña cuando necesitas compañía al caminar.

Quizá pase el tiempo, no nos veamos tanto, quizá por un tiempo los caminos nos conduzcan a sitios distantes, pero el verdadero amigo es un recuerdo constante, un mensaje inesperado, una llamada de ánimos cuando algo no es tan grato, una palabra en un correo para saber cómo hemos estado. Un amigo es ese hermano, que nos encontramos en el rumbo en el que andamos.

Si hoy recuerdas a esa persona especial que te acompañó no sólo en los mejores ratos, busca un segundo de tu tiempo, marca su número, ve a donde está, dale un abrazo lleno de las remembranzas de niños, de los juegos del pasado, sonríe con tu amigo, sé tú la nube en el cielo de tu hermano.

Cuando no se valora una amistad, es triste para todas las personas, no es normal que prevalezcan obsesiones sobre la certeza de contar con una mano amiga dispuesta siempre a ayudar, nos hacemos grandes, nos hacemos más, cuando brindamos a otro nuestra sincera y leal amistad, cuando decidimos aprender juntos en la aventura de la vida, cuando decidimos recuerdos juntar para hacer grata la rutina, los días, el tiempo, hasta llegar al más allá.

Un buen ejercicio para mejorar nuestra vida en Steemit es visualizarlo como ese cielo, aunque su filosofía sea la de un mar, es un lugar inmenso donde conocemos personas invaluables para creer y crecer en lo que hacemos, para mejorar en nuestra escritura, para mantener relaciones que nos apoyen en los proyectos que seguimos. En este cielo de aprendizaje, contamos con comunidades como @Cervantes, @minnowsupport, @emeeseese, estas comunidades nos permiten la diversidad del intercambio y la interacción, a través de la experiencia en Discord y de cada proyecto en el que nos invitan a participar positivamente.

Recientemente leí a mi amiga @Belkisa758, ella realiza una publicación muy interesante sobre:

Pensamientos Rígidos en el cual, resalta que debemos deslastrarnos de la gente negativa, e inflexible, porque lo ideal es adaptarse a los cambios de la plataforma en la cual hacemos vida, siempre estar en la sintonía positiva para aportar pasos firmes al logro de las metas, es decir, ser una nube positiva que interiorice que es parte de un cielo y no el centro del universo.
Fuente de la imagen:

Me despido con cariño. Gracias por su lectura.