En ocasiones hacemos promesas, idealizando lograrlas fácilmente, sin considerar las verdaderas oportunidades. Nos aferramos a los sentimientos, dibujando en el silencio el amor. Esto a veces es bueno, pero triste cuando esas promesas no pueden ser cumplidas, es entonces, cuando nos toca ser más fuertes y creer en nuestro yo interior.

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Durante el transcurso de la vida encontramos personas con las que nos encanta hablar, de cualquier tema, hasta de tonterías que nos suceden a diario; nos enamoramos de esas personas con las que creamos afinidad. Con esas personas podemos mirar las estrellas, mientras reconstruimos el mundo. Se nos hace fácil y entretenido conocerlas, podemos compartir sin darnos cuenta de ver pasar el tiempo.

La luna puede ser testigo de las promesas, cuando en la noche entre estrellas dos enaltecen su amor. Quizá como la bella Psique despertó por el beso del Dios Eros, así puedan surgir los besos sin medidas, entre dos mortales que se juran lealtad y comprensión.

¿Tenemos que defender los sentimientos?

Parece que los tiempos van cambiando y hoy en día es necesario defenderlos de la incomprensión, la dejadez, y hasta el desamor. Pero siempre vale la pena luchar por ellos.

Cuando las promesas se hacen con todo el corazón se inventan espacios para estar dos, se lucha con el tiempo, hasta con los secretos para mantener la ilusión. Porque como dicen por allí, cuando se quiere se busca, se acompaña, se queda al lado del otro, en las buenas y en malas porque simplemente son dos.

No sientas decepción ante un tiempo de espera, o quizá una reacción distinta a la esperada, si es verdadero amor resurge, puede renacer para volverse bueno tras una transformación, lo que lleva a poder confiar en tu corazón.

Las promesas de las personas cuando se quieren pueden hacer el mundo mejor, pueden hacer un baile bajo la lluvia, bajar una estrella o prometer el sol, y aunque inalcanzables son promesas que sostiene el amor. No son mentiras, son ilusión, necesarias para la fantasía que nace del corazón.

No dejemos que muera la frase: Mi persona favorita eres tú, en todas las vueltas de la tierra alrededor del sol. Porque es bella, porque es la elección perenne de tu amor en mi amor.